Mi Salvación ✓

11. Despertar

Scorpius se levantó a mitad de la noche y entro a la habitación de sus padres pero estaban tan espatarrados en la cama que no encontró hueco para dormir con ellos. Luego fue a la habitación de su abuela pero estaba durmiendo abrazada a su abuelo. Scorpius negó con la cabeza-Y yo ahora con quién duermo.

Fue a la habitación de su tía rezando porque ella no estuviera espatarrada en la cama como sus padres o con su tío. Tía-susurro moviéndola. Emm que pasa-dijo abriendo los ojos rápidamente. Pesadilla-susurro para que lo subiera a la cama que estaba algo alta.

Casiopea lo cogió y lo sentó a su lado. Lo tapó y lo abrazó-Porque no has ido con papa y mama amor. Pues estaban espatarrados en la cama así-dijo abriendo las pierna y extendiendo los brazo-Y fui con la abuela pero estaba abrazada al abuelo, así que decidí venir aquí-dijo mirándola. Espera has dicho que la abuela estaba abrazada al abuelo-pregunto. Si-susurro-Venga tía tengo sueño a dormir. Ella se rió-Vale pequeño mandon.

Lo abrazo mientras pensaba en lo que le acababa de decir. Porfavor mamá no seas estúpida-dijo en un susurro a la oscuridad.

Cas-dijo Draco moviéndole el hombro. Draco vete a tener más bebes-pidio adormilada. Draco se rió-Tenlos tu con mi padrino. No pensándolo mejor no me lo quiero imaginar-susurro poniendo cara de asco al imaginarselo. Sigo siendo virgen para tu información-susurro soltando a Scorpius-Que quieres. Draco suspiro aliviado y le dijo que le siguiera.

Entraron al cuarto de sus padres. O no Draco Scorp ya me lo dijo anoche, no me apetece verlos-dijo dándose la vuelta. Es que no es eso, mira-susurro señalando entre los dos. Amanda estaba abrazada a su madre como si se le fuera a escapar. Vamos a cogerla-susurro Draco pero Casiopea lo paro. Déjala dormir, además no quiero que vuelvan. No creo que papá haya cambiado. Vamonos-pidio antes de salir.

Cuando su madre bajo la saludo con una sonrisa pero ella no le dirigió la palabra
Te pasa algo hija-pregunto mirándola extrañada. Te has acostado con papa-pregunto mirándola. Ella negó-Solo, anoche dormimos juntos eso es todo. Amanda debió de llegar a media noche. Ella asintió.

Lucius bajo con Amanda de la mano. Buenos días-dijo mirandolas. Hola-dijo Narcissa poniéndose roja. Casiopea rodó los ojos. Casio... Casiopea... Papá me dijo que también eres mi hermana puedes jugar conmigo-pregunto tímidamente. Ella elevó una ceja solprendida-Si claro amor. Ven.

La cogió de la mano y se la llevó a la cocina. Que tal si primero desayunamos y así me cuentas cosas de ti-pregunto cogiendola en brazos. Ella asintió mientras la sentaba en la encimera.

Papi me dijo que os quería mucho, pero que se había portado mal-dijo la niña mientras Casiopea abría la nevera y cogía zumo de naranja. A si. Dijo eso-pregunto dejando el zumo a un lado de la niña. Ella asintió-Te puedo llamar Cas, es que se me hace difícil tu nombre-pregunto mirándola sonriente. Claro cielo-dijo besando su frente-Oye sabes una cosa, Scorpius sigue durmiendo. Si vamos a despertarlo para que desayune con nosotras nos lo pasaremos mejor. Ella asintió y estiró sus brazos para que la cogiera.

Fueron a su habitación y lo movieron. Scorpius-susurro Casiopea moviéndolo. Arriba-dijo la niña en otro susurro. Dejarme dormir un rato más-dijo Scorpius tapándose con la manta. No quieres estrenar tus nuevos regalos, ni te apetecen mis famosas tortitas-pregunto acariciándole la mejilla. Él abrió los ojos y asintió-Buenos días Amanda. Hola-dijo tímidamente.

Bajaron a desayunar y mientras hacía las tortitas oyeron la chimenea. El tío-dijo Scorpius bajándose de la banqueta. Cas se rió y Amanda se acercó más a ella. No tengas miedo es Severus mi novio-dijo sonriéndole. Ella sonrió y hecho un poco más de harina. Se le hacía muy raro llamarlo novio.

Buenos días-dijo Severus entrando por la puerta arrastrando a Scorpius. Hola amor-dijo sonriendole-Ves Amanda. Ella asintió y fue a recibirlo. Scorp a este paso me vas a bajar los pantalones-se quejo mirando al niño que abrazaba su pierna. Cas se rió. Cogió a Amanda y Scorpius en brazos y se sentó con ellos. Tus famosas tortitas-pregunto mirándola. Ella asintió terminando por fin de cocinar. Scorpius Amanda porque no vais a llamar a los demás para que se vallan sentando-pregunto mirándolos. Ellos asintieron saliendo corriendo. Olivia no quiso venir-dijo Severus. Ella asintió acercándose a él.

Algún día va a tener que ser una mortifaga, no lo podrás evitar más-susurro mientras lo rodeaba con los brazos. Lo sé, ya hemos hablado de ello. Pero ahora vamos a desayunar-susurro besándola.

Llevaron las cosas a la mesa y se sentaron. Amanda cómo te gustan a ti, yo te lo hecho-dijo Scorpius mirando a la mesa buscando algo. Amanda se encogió de hombros. Me temo Scorpius que nunca a comido tortitas-contesto Lucius. Pues entonces te voy a hechar un poco de todo para que elijas. Eso hacía mi tía cuando era pequeño-dijo sonriente cogiendo la miel y el sirope. Empezó a coger mermelada y más cosas hasta que no se le veía. Amanda sonreía ilusionada.

No te pases Scorpius-le dijo Astoria mirando al niño. Él asintió terminando de echarle cosas. Cuando Amanda probó todo decidió que estaban mejor con chocolate blanco y mermelada de moras.

Los elfos recogieron todo hasta que una lechuza entro volando y dejo un sobre sobre Severus.

Era de Olivia, lo leyó rápidamente y se fue sin dar explicaciones. Cuando llegó Olivia estaba depie al lado de la chimenea evitando la mirada de Voldemort y Bellatrix. Se marchó en cuanto lo vio aparecer, parecía que tenía lágrimas en los ojos.

Buenas tardes Severus-dijo el Lord sonriéndole con su aspecto normal. Lo siento por la tardanza mi señor-dijo haciendo una reverencia. Déjate de tonterías Snape, ve al grano Tom-dijo Bellatrix levantándose. Delphiny está especialmente mal desde ayer, no a parado de llorar y creo que tú la harías sentir mejor-dijo mirando a su esposa de reojo.