*Capítulo 26: Pequeños errores, grandes problemas.

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Dedicado a: silairamrsh muchas gracias por leer y espero que poco a poco la historia te atrape. Gracias por el apoyo y disfruta el cap! 😊😊

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8 meses después.

Aarón

— Aún puedo recordar como si hubiera sido la semana pasada cuando venimos aquí por primera vez. Parecíamos un borregos asustados. — dijo Hanna una vez que nos adentramos en el puerto.

— Quizás tú, pero yo aún sigo desconfiando...

— ¡Claro, señor desconfiado! Pero te aseguro que tu billetera no piensa lo mismo. — rodé los ojos.

— Eso no tiene que ver...

— Aja, lo que pasa es que siempre le quieres encontrar el lado malo a todo...

— Se le llama ser precavido...

— Más bien paranoico..

— Tómalo como quieras pero mi paranoia ha hecho que las últimas bromas salgan más que bien. — Hanna se quedó pensativa antes de hacer un ligero puchero. Yo había ganado. — Tu silencio solo lo confirma.

— ¡PERO! Ese no era el punto. — detuve el auto frente a la bodega. — A lo que yo quería llegar es que te quejas de no confiar en Matt pero aceptas el dinero.

— Sí, porque sé que ese dinero viene de las bromas, pero ¿tú crees que el tipo tiene todo esto solo por nuestro trabajo? Sabemos que está metido en cosas turbias. Y eso me basta a mí para desconfiar.

— Tienes un punto... — hizo una mueca, yo solté un suspiro.

— Solo digo que hay que tener cuidado, no porque con nosotros haya sido amable significa que así es con todos... o todo el tiempo será así.— Hanna asintió.

— Solo hay que hacer nuestro trabajo y todo estará bien. — puse notar que ese comentario era más para ella que para mí.

Momentos después bajamos del auto, y nos encaminamos a la oficina de Matt.

— ¡Aw! ¡Mi dúo favorito! ¡Adelante! — dijo Matt en cuanto nos vio en la puerta, y una vez que nos adentramos pude notar que no estaba solo.

El chico, William, que le conseguía las cosas a Hanna para las bromas estaba ahí. Y como como siempre nos miró con frialdad. La verdad no sabía si esa era la intención o simplemente así era él, pues desde que lo vi por primera vez para la broma en la hermandad gamma, donde le consiguió a Hanna cientos de luces navideñas, ese a sido su comportamiento. Mirada fría y solo 5 palabras como máximo; era intimidante.

— ¿No crees qué son adorables, Will? — este último se encontraba sentado en un sofá leyendo un libro, del cual dejó de poner atención para mirarmos de arriba abajo antes de retomarlo.

— Diré que sí, me pagas por darte la razón. — Matt soltó una carcajada. Hanna y yo nos miramos incómodos por la situación.

— Es por su carisma que lo tengo en mi equipo. — dijo con sarcasmo Matt, o eso quise pensar. — En fin, los llamé para que vieran a recoger lo necesario para la siguiente broma, ya que ¡ALGUIEN! esta muy ocupado estudiando para sus exámenes y no quizo hacer si trabajo.

— Por muy sorprendente que te parezca, hay quienes sí vamos a la universidad a estudiar y no a hacernos idiotas.

— Yo voy a hacer negocios, técnicamente estoy cumpliendo la tarea principal de la universidad que es prepararte para el futuro. — luego de esa frase de Matt, William negó y dejó de prestarle atención. — como les iba diciendo, alguien más les consiguió las cosas pero como es nuevo en esto no lo quise enviar, además de debe dinero ¡NUEVO! — Hanna y yo nos sobresaltamos con ese último grito pero a los pocos segundos un chico apareció en la oficina.

Mi Aferrado. {Mitades Opuestas #3}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora