'♡ - Too soft'

♡' - Capítulo 5

— Me mintieron.

Los cuatro chicos voltearon a mirarlo. Tenía los ojos rojos, los labios fruncidos y el ceño muy fruncido. Apretaba los puños con furia, esto ayudándolo a que no se le acabará la poca cordura que le quedaba y los golpeara ahí mismo. Estaban en medio de la cafetería, así que habían llamado la atención de muchos alumnos.

— ¿De qué hablas, Minho?

—Ustedes— Los señaló a los cuatro — En especial tú, me mintieron.

La última persona señalada, conocido como Minhyuk, solo enarco una ceja. Hubo un silencio durante alrededor un minuto, el grupo se miraba con total confusión, la multitud al rededor soltaba murmuros. Minho solo tomaba bocanas grandes de aire. Juraban que salía humo de su boca.

— ¿¡No lo recuerdan!?— Gritó — ¡Dijeron que él tiró mi carta! ¡Me mintieron, malditos descarados!

—Wow, ¿en qué momento te mentimos? te habíamos dicho la verdad— Defendió un chico de baja estatura. Otro chico asintió mientras tomaba de su café.

—¿Y por qué querrían decirme, eh?— Empujó al chico que acababa de hablar— Apenas los he conocido... ¡Él es mi único amigo, intentaron dejarme solo!

—¡Mierda, no lo digas como si fuésemos unos mounstros! tú siempre hablas bien de ese niño, nos preocupamos de que te este haciendo daño, somos tus amigos, no queremos qu-

Minho le dio un golpe. No fue uno fuerte, debido a que no estaba muy ejercitado, pero fue uno que debió doler.
Otro chico se acercó y le dio el mismo golpe en la cara.

Las personas al rededor empezaron a moverse en pánico, algunos grabando la pelea, otros alentandolos a seguir y un par más diciéndoles que mantuvieran la calma.

Minho sentía su boca y nariz sangrar, se tambaleaba al intentar seguir de pie y le daba golpes débiles al otro chico.

Un chico y una chica se acercaron a separarlos, inmediatamente llevando al alto a la dirección y a Minho a la enfermería.

Las personas seguían grabando mientras reían.

"Que debilucho"

"Aburrido"

"Pobre"

Su cabeza daba vueltas mientras esas frases se repetían en su cabeza, la imagen de su mejor amigo se repetía una y otra vez, el como lo dejaba frente a todos esos insultos, como lo abandonaba como si nunca hubiese significado nada para él.

Cerró sus ojos con fuerza, deseando que esas imágenes nunca se volvieran una realidad.

—No debiste haber peleado, Hoonie— El menor hizo un puchero a la vez que limpiaba la herida en la mejilla de Minho.

—Perdón... — Hizo una mueca de dolor al sentir el alcohol— Ellos decían cosas malas de ti... no podía dejarlo así.

—Le había dicho que ya no se juntara más con ellos, hyung— Frunció el ceño.

La forma en la que limpiaba su herida paso de delicada a algo bruzca en ese momento.

—Perdón, solo quería decirles eso— El menor sonrió, volviendo a esa forma suave de cuidarlo.

Él no le tomó importancia, ¿por qué debería? seguro estaba enojado porque no le hizo caso, tenía sus razones. Era su culpa por no hacer lo que le pidió.