8

9 0 0
                                    

El tono de mensajes de mi celular había sonado.

—Hay reunión de negocios mañana, es mejor que llegues la reunión sera en el restaurante Shen Kong a las  7:00 pm.

Destestaba los mensajes de mi padre pero no tenía de otra más que obedecer cundo se trataba de negocios para la cadena de restaurantes que dejó mi madre a mi nombre, ser estudiante de tercer año de carrera y estar buscando la mejor opción de universidad era cansado.

Ahí estaré, no llegues tarde como siempre.

Esta semana será cansada realmente...

Por la noche...

—Bienvenido joven Alan, —Me saludo el empleado del restaurante. —El salón Prin, está listo, la mayoría de sus colegas ya están ahí. —Terminó por decir y despidiéndose.

Colegas, si solo era un interesado segun lo dicho porbel viejo. —Pensé para mi. —Habrá que ver qué es lo proponen y veremos el mejor candidato de inversión.

Mientras iba por el corredor, una de las salas se abrió rápidamente y sin darme tiempo de reaccionar, unas manos me arrastraron hacia dentro y todo quedo oscuro, no veía nada.

—¿Qué es ésto, qué significa esto?  —Me arrepentí de abre hablado.

Solo sentí como un puño impacto contra mi abdomen haciendo que todo el aire saliera de mí, mi cuerpo terminó en el suelo y yo son la posibilidad de hacer que el aire regresará a mí.

—Cubranle los ojos y llevenlo a la parte tracera. —Una voz familiar daba  las instrucciones. —Muy bien acá terminamos nuestro encuentro. —El tono fue más serio, un escalofrío recorrió mi columna.

—Por supuesto, fue un placer hacer negocios. —Ess voz... Es de..

—Ggnn. —Un gruñido salió de mí, al sentí como una aguja atravesó mi piel. —Malditos. —Las fuerzas se fueron de mi cuerpo y un sueño profundo empezó a invadirme.

—Dulces sueños mi bella preza. —Su tono seductor me dio asco, al mismo tiempo que pasaba su pulga sobre mi labio inferior.

Mi cuerpo peso y terminé sumergido en la oscuridad y dios de los sueño me tomo emtre sus brazos.

Días después...

Tras el trascurso de varios días Alan abia sido trasladado a Korea.

La conciencia estaba regresando a mi, mi cuerpo dolia,  las últimas imágenes de lo sucedido estaban golpeado mi cabeza, la sujete con fuerza por el dolor, otro joben casi de mi edad incluso mayor se acercó a mi y me brindo unas pastillas y agua.

—Tomalas te ayudarán con el dolor de cabeza. —Su sonrrisa era gentil, terminé por tomarlas. —Descansa otro poco, hasta que las pastillas hagab efecto.

Efectivamente después de unos 15 minutos el dolor de cabeza había desaparecido.

—Que bien, al parecer ya estas mejor. —Siempre sonreía.

—Si gracias. —Dije únicamente.

Empecé a ver mi alrededor y había más chicos, como hombres mayores atractivos.

—¿En donde estoy?  —Pregunté. —Esto no me agrada nada.

—En este momento nos encontramos en Korea. —El lo decía con una gran naturalidad y alegría.

—¡Que, Korea!, dime que es una broma. —Me levante alarmado de lo que parecía ser uma cama. —Esto es imposible, como puedes decir que estamos en Korea tan tranquilo. —Le grite.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 11, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Ofrenda de PazDonde viven las historias. Descúbrelo ahora