El historial de su operador estaba lleno de búsquedas con el fin de encontrar información sobre vidas pasadas, rencarnación y qué era la supuesta "hipnosis regresiva". Se sentía como una persona del siglo pasado con una mente cerrada, pero no podía evitarlo cuando las cosas se tornaban distintas y en cierto grado le causaban temor.
Taehyuk no quería volverse más loco de lo que ya estaba, así que no volvería más con el psiquiatra que le había recomendado Minjae. No lo mal entiendan, pero es que realmente tenía muchísimo miedo.
La reencarnación era una de tantas teorías que se tenían de las vidas pasadas y las regresiones. Según estudios, solo personas con almas de energía alta o vieja suelen tener visiones, sueños o fobias relacionadas a recuerdos y vivencias que la misma alma sufrió en otras situaciones, otras épocas, lugares y hasta planetas.
¿Realmente le había tocado vivir eso a él? Lo peor de todo, era que cumplía con todas las características que le eran señaladas.
No quiso hablar del tema con nadie, ni siquiera con su madre. Le asustaba demasiado, ya que en los mismos estudios se mencionaba el peligro que se corría tras someterse a tratamientos como lo es la hipnosis regresiva; la persona puede quedar en coma después de desconectar a su consiente, con la razón vagando por cualquier parte. Otro caso sería, que las visiones y los supuestos recuerdos pasados se apoderen de la conciencia actual, olvidándose del presente y de la persona que es. Parecido a fingir una personalidad.
*
Pasaron los días y los sueños no dejaban de reproducirse, junto a los mareos y dolores de cabeza que se ponían cada vez peor. Estaba pálido y débil, con unas enormes ojeras bajo sus ojos, solo preocupando a sus padres por el estado en el que se encontraba y el cual quería ocultar, resultándole inútil.
Una noche, las cosas cambiaron de rumbo bruscamente. Como si se tratara de un volantazo cuando el auto se quedaba sin frenos; así de grande y rápida era su incertidumbre cuando tomó conciencia de su oscuro soñar.
Taehyuk estaba completamente sumergido en el sueño, donde una casi inaudible melodía estaba presente en aquel cuarto oscuro donde él se encontraba de pie, sin poder verse a si mismo, teniendo el panorama en primera persona. En un parpadeo, un hombre apareció frente a él, con cabellera negra y una vestimenta formal con tonalidades azules, tez blanca, quien comenzó a bailar al ritmo de la melodía que se hacía cada vez más audible, tambaleándose de un lado al otro.
Le tomó por sorpresa que este mismo hombre acortara la distancia entre los dos, y tras un suspiro tomar sus labios en un beso, nunca logrando ver su rostro.
Se sentía nervioso y sorprendido, pues poder sentir lo suaves labios con los que mantenía un ritmo pasional, poder percibir el olor de una colonia muy suave e inclusive notar unos fuertes y rápidos latidos en su pecho, le hacía dudar si en realidad era un sueño. Rodeado por los brazos del hombre frente a él y sentir la tela de la camisa al posar sus manos en la espalda baja, lo hacía querer llorar.
Después todo se volvió negro, y volvió a escuchar el triste lamento de la aquella voz, asemejando un llanto.
Despertó sudando frío y agitado, con una sensación de dolor, de tristeza y desesperación.
Cuando logró recapitular el sueño después de unos minutos, cayó en cuenta que nunca vio el rostro del hombre que besó en su sueño.
¿Sería acaso que la voz que escuchaba tenía alguna relación con el hombre que soñó? su cabeza volvió a doler por el estrés.
Carajo, tenía que hacer algo ya o se volvería totalmente loco.
Horas más tarde y con una decisión tomada, salió de la casa de sus padres rumbo a la pastelería que ya había visitado en dos ocasiones.
Había estado recapitulando todos sus sueños, anécdotas y cosas extrañas que sucedieron en cuanto llegó a Paris, mientras que sus padres habían salido a una semifinal de ajedrez en la cual su padre fue calificado.
Le dolía no estar presente, pues la mirada confusa de su madre se sintió como un reproche.
Pero no podía seguir esperando, seguir guardándolo sin preocupar a sus padres; quería solamente saber si podía hacer algo o si tenía un tornillo ya suelto.
Era un día domingo.
Llegó y se estacionó, bajando del auto de forma apresurada con fin de ver al chico rubio de nombre Woosik, no sin antes sacar de su bolso el collar de plata que era perteneciente a su madre, para mostrarlo y...
"realmente estoy volviéndome loco" pensó.
Todos sus síntomas habían aparecido después de toparse aquel primer día en París con ese joven.
No lo dudó ni un segundo más y se adentró al local con el collar en el bolsillo de su pantalón, manteniendo la mano dentro de este para sentirlo junto a él.
Sin embargo, no esperaba encontrarse con un hombre diferente detrás del mostrador, con una cabellera negra y vestimenta casual; un jean de mezclilla. Este mismo seguía dándole la espalda mientras hablaba con una mujer un poco más baja de estatura.
Taehyuk empezó a sentirse nervioso sin saber por qué, solo notando el rápido latir de su corazón y un dolor de cabeza que amenazaba con aparecer. Desvió su vista hacia todo el interior del local, buscando al chico de cabello rubio, pero sin obtener resultado.
Parecía un adolescente inseguro y no aquel hombre aparentemente estable de 26 años.
Volvió la vista a la cabellera oscura que le daba la espalda, esta vez viendo su celular al no tener a nadie en frente, así que carraspeó para llamar su atención.
- Mh... busco al joven Woosik, me enteré que –
Su oración quedó incompleta cuando el hombre se volteó, dando así la vista de su rostro a Taehyuk, y este... simplemente se quedó en shock.
Era como si una máquina del tiempo hubiese detenido el momento en el que el hombre, de su misma estatura, volteó y cruzó miradas con él, dándole la oportunidad de ver aquellos ojos grandes y oscuros, que tenían un brillo peculiar, con la única distancia de 40 centímetros entre ellos debido al mostrador.
La mano que estaba dentro de su bolsillo y rodeando con sus dedos el collar de plata, ardió.
De pronto, el recuerdo de la exposición aquel primer día que llegó a Paris, volvió a su mente y consigo, el rostro que miró en aquella foto que exponía la noticia de la marcha del orgullo gay en Inglaterra.
Era el mismo que tenía en frente.
El dolor de su cabeza explotó en su totalidad haciendo que frunciera su rostro debido al fuerte dolor, las piernas le temblaron y se sintió desvanecer, cerrando sus ojos y perdiendo la conciencia antes de sentir el golpe del suelo contra cuerpo, debido al impacto de haber caído inconsciente.
Y en ese mismo estado, no sentía... solo escuchaba esa misma voz que lloraba en sus sueños, pero esta vez hablando de forma entendible, con susurros que parecían querer hacerlo dormir.
"Taehyung, mi amor, regresa conmigo" .
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Otra cosa, investigué mucho sobre la hipnosis regresiva pero todo estaba muy revuelto, así que no tomen muy enserio los pequeños detalles.
Por último pero no menos importante, Feliz cumpleaños a nuestro querido Jungkook <3
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Encontré a quien amar |Taekook|
Romance" ¿Me volverás a amar hasta el día de tu muerte?" "Y en cada una de mis siguientes vidas, si es posible..." - final alternativo / no hate por favor