Tú y yo

El principio de todo

Una muchacha de ojos plata y cabello azulado largo, caminaba sin muchas ganas hacia su casa, estaba harta de su vida, su padre la menospreciaba y hoy sería la prueba definitiva, tenía que demostrar ser más fuerte que su hermana Hanabi, su familia tenía un dojo y a la vez era de las mayores empresas que existían, al principio si padre siempre era cálido con ella, incluso cuando su madre murió, sin embargo... desde que su primo Neji murió en un accidente de coche, él, mi padre ya no era el mismo, parecía que me culpara a mi de su muerte.
La chica llegó a la puerta de su casa y la abrió, dejándose ver adentro un montón de jaleo, muebles rotos, y al fondo en el despacho de su padre se escuchaban gritos.
-.¡Me niego!-. Se escuchaba una voz de una chica, Hanabi su hermana, fue lo último que se escuchó antes de que su padre la empujara fuera del  despacho pero cuando sus ojos se encontraron con los de Hinata, la pequeña Hanabi rompió a llorar y salió corriendo hacia su habitación.
Hanabi tampoco quería pelear con ella.
Miró a si padre enfadada, por primera vez lo hizo y con mirada desafiante le dijo:
-. Padre, necesito hablar contigo-. Dijo intentando aguardar en su interior la furia que sentía en esos momentos, era de su pequeña hermana de quienes estaban hablando, no quería mas esto.
-. De acuerdo-. Dijo Hiashi dejandole paso a su hija mayor-. Pasa-. Hinata pasó y apretando sus puños se sentó,
Hinata lo miro con el ceño fruncido.- Padre, no quiero pelear con mi hermana Hanabi.- Hiashi la miró sorprendido era la primera vez que se negaba a sus órdenes.
-.No te puedes negar-. Hiashi se sento la silla de su escritorio con calma y entre cruzando sus dedos enfrente de su cara la miró desafiante.
-.Si puedo-. Dijo la chica-. Y ya sé que hacer, lo siento padre, no quiero el título de heredera, renuncio a mi derecho como heredera de las empresas Hyuga-. Su padre se quedó consternado mientras su hija se levantaba de su asiento y le daba la espalda-. Iré a recoger mis cosas, desde ahora no tengo nada que ver con vosotros-. Su padre iba a contestar pero ella se le adelantó-. Es mi decisión.
Dicho esto Hinata salió de a habitación y afuera estaba esperándola Hanabi quien miraba el suelo mientras lágrimas surcaban sus mejillas, no quería pelear con su hermana pero mucho menos quería que su hermana se fuera, Hinata viéndola en tan deprolable estado se agachó a su altura y la abrazó y acariciándole el pelo le dijo.
-.Tranquila mi pequeña hermanita, vendré seguido a verte-. En eso se separó de su hermana y le secó las lágrimas con sus pulgares antes de dar media vuelta y subir a su habitación donde cogió una maleta y empezó a guardar su ropa, ella solo era una niña de 17 años pero seguiría adelante sin el dinero de su familia, estaba harta de ver a su hermana llorar por sus continuos enfrentamientos ordenados por su padre, estaba harta de que la vieran como un insecto, harta de ver tanto hostilidad hacia ella, Hanabi estaría mejor sin ella en casa, ya podría tener libertad, lo único que le dolía era dejarla sola cuando sólo estaba su padre y las criadas, pero Hanabi era fuerte sería capaz de aguantar todo.
Pensando esto cogió su pequeña maleta y una bolsa con algunas de sus cosas y salió de aquella habitación y de aquella casa que la había crecer, este era el principio de todo, de su nueva vida