Capítulo 1

66 5 0
                                    

Levantarme el día de hoy ha sido un suplicio, más al ver la hora y darme cuenta de que mi mejor amiga no me levantado, supongo que aun sigue molesta por mis contantes insinuaciones sobre que quizá ella tiene flechado a cierto rubio platinado.

No tengo tiempo para arreglarme como quisiera, había incluso planeado peinarme de forma diferente, pero nos hemos trasnochado, haciendo un paseo de medianoche junto a nuestros amigos. Sé que él lo entenderá, cumplimos un mes de novios y lo he llegado a conocer de tantas formas que casi puedo leer su mente.

Es un gran alivio no caer por las escaleras cuando bajo hacia la sala común, encuentro a una de mis personas favoritas esperándome apoyado en la pared, es un gran sorpresa no ver a mi novio junto a él, y aunque quiero preguntarle por él, no puedo pues me arrastra por los pasillos del castillo.

- Draco, ¿Por qué vamos tan rápido?

- Tenemos pociones en 5 minutos.

- Vamos, de seguro alcanzamos a pasar por la cocina y pedir una fruta.

Tengo que equilibrarme porque me ha saltado mientras íbamos corriendo. Su rostro tiene una mezcla extraña, ira, molestia, fastidio, pero sobre todo intriga.

- No hay tiempo para esto, conoces las reglas de Snape.

Vuelve a tomar mi mano y no me da tiempo a responderle, mis pasos son obviamente más cortos que los de él, pero no es un impedimento para que me siga llevando casi arrastras por partes del castillo que incluso desconocía.

- Dragón, no tan rápido.

No hace caso omiso a mis palabras, solo es cuando estamos entrando al aula me doy cuenta a donde hemos llegado ¿Qué hacemos en el aula de pociones? ¿Por qué demonios Draco se ha sentado junto a mí? ¿Dónde está mi novio y mi mejor amiga?

- No llevas maquillaje.

- Lo sé.

- ¿Por qué no llevas maquillaje?

- Sabes que soy pésima en eso, esa es cosa de Mione.

- ¿Mione?

Sé como identificar cuando Draco miente, lo conozco de toda la vida, pero justo a hora solo noto confusión en su rostro, así como ligero asco. Otra vez no puedo preguntarle lo que deseo y está vez es porque él está demasiado cerca de mí, tengo un ligero ataque de pánico cuando sus manos se colocan a cada lado de mi rostro y trata de acercarse, gracias a Morgana el sonido de la puerta lo hace apartarse.

Todos los presentes se encuentran demasiado silenciosos en este momento, pero a mi eso me da tiempo para recorrer con la mirada el lugar y ver a las personas que tanto he estado buscado, cuando quiero hacer un movimiento con mi mano para llamarlos, Draco baja esta y la sostiene con fuerza.

- Entreguen sus pergaminos sobre la poción de la clase anterior.

Ver a Severus Snape vestido totalmente de negro es un visión más que espeluznante, el sonido bajo de sus voz incluso hace que me sienta enferma, es como si en cualquier momento él nos podría enviar alguno de los 3 imperdonables.

- Dragón.

- No me llames así, Parkinson.

- Pero, hoy no teníamos pociones.

Él no me escucha pues tal como los demás está entregando el pergamino, ¿Qué día es hoy? ¿Acaso es martes y no lo he notado?

- Faltan dos pergaminos, quiero saber quien no ha entregado su trabajo.

Nunca le he tenido miedo a Severus Snape, he crecido junto a él, pero ahora siento que me han lanzado el hechizo petrificador, porque no puedo ni siquiera mover un musculo.

Pansy Parkinson y la realidad alternativaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora