Niñeras

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Deku y Todoroki llegaron a tiempo, como deberían. Después de todo, son algunos de los principales héroes de Japón; Katsuki les haría a cada uno uno nuevo si no pudieran manejar algo tan simple como la puntualidad. Especialmente cuando se trata de su hija.

Kawa irrumpe a través de la puerta, su cara pintada como un tigre, seguida por un Deku demacrado y un Todoroki mayormente estoico pero visiblemente agotado. Ambos hombres lucen pinturas de caras de animales similares, aunque la de Deku se parece más a un panda y la de su novio a una vaca. Katsuki frunce el ceño a la pareja, mientras Kawa se lanza a los brazos de Ochako a modo de saludo.

-Oi. ¿Es esto algo que tendré que limpiar más tarde?-Katsuki gruñe, estirando la mano para pellizcar la mejilla pintada de su hija.

-Probablemente,- responde Todoroki sin rodeos, mientras Deku le ofrece al rubio una sonrisa avergonzada.

-¿Te divertiste en el carnaval, Kawa?- Ochako pregunta, dándole un rebote al pequeño mocoso.

-¡Sí!- Kawa exclama, retorciéndose en los brazos de su madre para poder golpear a Katsuki en el hombro. -¡Papá, no me dejaron montar en el paseo más grande allí!- grita apasionadamente.

-¿Quién no lo haría?- Katsuki entrecierra los ojos con sospecha a sus antiguos compañeros de clase.

-La gente. Dijeron que era demasiado bajo. ¡Eso es basura!- Kawa arruga la nariz. -¡Podría haberlo hecho!-

Katsuki evita con vehemencia la mirada furiosa que Ochako le envía, han estado tratando de trabajar en el lenguaje de Kawa. Él no sabe de dónde diablos lo sacó, y nadie puede probarlo. -Eso es una mierda, Mochi Face-, responde Katsuki, dándole una palmadita en su hinchada cabeza rubia. -Sé que lo aplastarías-.

-¡Lo sé, papá! ¡Eso es lo que les dije a los idiotas! 

-Kawa, ¿quieres mostrarles a tus padres el premio que ganaste?- Deku pregunta, y Katsuki se da cuenta de cómo está ocultando algo detrás de su pierna.

-¡Oh sí!- Kawa salta de los brazos de Ochako y corre para agarrar un peluche de Deku. Sin embargo, cuando se vuelve para correr hacia sus padres, tropieza con sus propios pies y cae de rodillas.

Mierda. No otra vez.

Kawa, ese clutz de bola de fuego de un engendro, ha estado pasando recientemente por una fase de llanto. Cualquier pequeño golpe, golpe o golpe, y ella es incorregible, incluso cuando no se lastima. Katsuki no sabe qué pasa con los niños, si solo lloran por el placer de hacerlo o qué. No tiene ningún sentido para él.

Efectivamente, como un reloj, la cara de Kawa comienza a fruncirse de esa manera que significa que está a punto de perder el control, cuando de repente, algo realmente extraño sucede.

-¡Hurra! ¡Buen trabajo, Kawa! ¡Estas bien!- Ochako dice alegremente, aplaudiendo alentadoramente.

Katsuki se vuelve hacia su esposa, a punto de preguntarle con franqueza si está drogada, cuando la cara de Kawa se calma y se levanta como si nada hubiera pasado. Katsuki intercambia miradas con sus estúpidos rivales, quienes aparentemente están tan sorprendidos y desconcertados por el hecho como él. Solo cuando Kawa se retira a su habitación para dejar su premio, él exige una explicación.

-¡¿Qué tipo de brujería fue esa ?!

Ochako lanza una mirada divertida en dirección a su esposo, y luego se ríe cuando se da cuenta de las expresiones de asombro de Deku y Todoroki también.

-Lo leí en un libro-, explica. -La mitad de las veces que los niños lloran cuando se caen es porque están reaccionando a cómo reaccionan los adultos que los rodean. Piensan que ha sucedido algo terrible, por lo que su respuesta apropiada es llorar-. Ochako se encoge de hombros. -Pensé que intentaría hacer que pareciera algo positivo.

-Ya veo-, asiente Todoorki. -Eso tiene mucho sentido.-

-¡Eso es brillante, Uraraka!- Deku exclama, y ​​luego hace una mueca. -Ochako. Lo siento, todavía no puedo acostumbrarme a eso.

Ochako sonríe tímidamente cuando Katsuki le envía una mirada de asombro apenas velado. Él nunca habría pensado en algo así en un millón de años, pero no le sorprende que ella lo hiciera. Ella siempre ha sido buena con ese tipo de cosas. Ella es alucinante.

Como que quiere follársela de nuevo.

Más tarde, cuando los cuatro héroes y Kawa están sentados en su sala de estar, con pintura facial y todo, comienzan a hablar sobre el trabajo. Es inevitable en su línea de negocio; sin mencionar que es lo que todos tienen más en común entre sí. No muchos héroes pueden decir que han soportado múltiples incidentes potencialmente mortales con sus ex compañeros de clase.

-Te vi peleando con ese villano novato el otro día, Deku,- se burla Katsuki, haciendo rebotar a su hija en su rodilla mientras habla. -Un derribo bastante lento para el héroe número uno-.

-Desearía poder culpar a un mal día, pero estaba más resbaladizo de lo que esperaba-, responde Deku, agarrándose la barbilla pensativo, y todavía luciendo como un panda mientras lo hace. -Su peculiaridad permitió que su cuerpo se moviera con tanta fluidez; a veces era difícil saber si era más líquido o sólido.

-¡Todo lo que digo es que es mejor que permanezcas en tu juego antes de que te gane!- Cinturones Katsuki.

-En realidad, a juzgar por las estadísticas actuales, estoy más cerca de superar a Dynamight que tú a Deku-, agrega Todoroki de manera neutral, ganándose una mirada asesina.

Ochako pone los ojos en blanco afablemente. -Ustedes y sus clasificaciones. Las cosas no han cambiado tanto desde UA, ¿verdad?

Deku se ríe. -Supongo que no.- Pero luego hace una pausa. -Aunque, a veces doy por sentado lo subexpuestos que estábamos en ese entonces. Al menos desde el principio.

Ochako frunce el ceño y Katsuki deja de hacer rebotar a Kawa.

-¿Qué quieres decir, Deku?- Preguntas de Ochako.

Deku y Todoroki intercambian una breve mirada.

-Los medios de comunicación han sido especialmente implacables últimamente-, admite Todoroki. -El crimen está en su punto más bajo, por lo que sin un villano importante en el que concentrarse, han estado poniendo la mira en ... pedazos de puff.

Katsuki bufó. —¿Te refieres a esos estúpidos artículos de chismes? Uh, me refiero a idiota-, corrige, cuando Ochako le lanza otra mirada severa.

Deku asiente, luciendo mucho más incómodo. -Un equipo de reporteros se presentó en el apartamento de Shouto el otro día, exigiendo saber por qué no estamos comprometidos o viviendo juntos-. Él se encoge. -Dijeron que era 'sospechoso', considerando que hemos sido exclusivos durante los últimos ocho años.

-¡Eso es increíble!- Ochako jadea, indignada. -¡Eso es una invasión total de la privacidad!

-Es inaceptable-, agrega Todoroki, la ira hierve a fuego lento bajo su tono helado. -En lo que a mí respecta, si la ciudad es segura, no hay razón para hacer más preguntas. Especialmente los de carácter personal.

-¡Bueno, que se jodan!- Katsuki declara, ignorando la risa de Kawa y la palma de la mano de Ochako. -¿Qué esperan? Son dos de los principales héroes de Japón. ¡Si fuera yo, les haría estallar uno en la cara!

-Este es un tipo de batalla diferente al que estamos acostumbrados, Kacchan,- le informa Deku, enviándole una mirada de preocupación. -Esto no es como un villano normal. Los medios pueden ser astutos. Pueden torcer una narrativa o informar algo fuera de contexto. Tiene matices.

-¿No hay nada que podamos hacer para ayudar?- Ochako pregunta, alisando distraídamente el cabello de Kawa. Todoroki niega con la cabeza, mientras Deku sonríe suavemente. Se acerca y entrelaza sus dedos con el usuario de la peculiaridad de hielo y fuego.

-Lo apreciamos, Ochako, pero esto es algo que Shouto y yo tenemos que resolver por nuestra cuenta, responde Deku.

Todoroki asiente. -Esta es nuestra batalla. Alégrate de que sea uno con el que no tienes que luchar.

Katsuki comienza a hacer rebotar a Kawa en su rodilla de nuevo, un profundo ceño tirando de su rostro. 

El padre del año //kacchakoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora