Cuando te preocupa tanto lo que alguien opine de ti solo puede ser por dos razones… la segunda es porque es tu jefe.
Bueno, en este caso tu asistente, pero es que ya da igual. Ranma ha minimizado su consumo etílico diario solo por que a ella le desagrada. Ni siquiera me escuchó cuando yo se lo pedí y estoy seguro de que dejó la terapia casi tan pronto como la inició.
Y por lo que he visto estos días, esa chica también le ha devuelto sus ganas de vivir.
Esa noche, como siempre, le he dado una mirada más extensa de lo que las buenas costumbres indican a la mesera del restaurante. Una mujer hermosa, por supuesto. La chica fingió timidez y nos dejó el menú. Ranma también la miró y le regaló una sonrisa.
Increíble, hasta hace pocos días él ni siquiera la habría mirado.
-Entonces, te interesa o no?-le pregunté inclinándome hacia él.
-A que te refieres?
-La cena de caridad. Estas interesado en hacerlo?.
-No lo sé Ryoga...
-Ves?, por eso digo que merezco un aumento, siempre me encargo de todo.
-Te das demasiado crédito, amigo
-Digamos que conozco mi valor.
-Bien, entonces, dime rápido. Qué es esto ahora? Y ya deja de mirar a la mesera, joder ¿qué no tienes ya suficiente compañía en casa?.
-Siempre estoy solo en casa a menos que estés tú, por eso te amo
-Eres un idiota, Ryoga-me contesta tomando mis palabras en broma. No es una broma, realmente te amo Ranma.
Y en realidad nuestra mesera era muy sexy, lástima que sus hermanos trabajaban con ella en el restaurante y no han tomado a bien mi coqueteo con su hermana menor.
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.Akane golpeó con el lápiz la hoja en blanco sobre su escritorio. Cuando Ranma no estaba la oficina parecía inmensa. Ladeó la cara para mirar a través del cristal y pasó las manos sobre su sedoso cabello negro.
¿ Cuántas veces exactamente ella había hecho el ridículo?
Bésame o renuncio?
Eres mío?
Te gané en una apuesta?
Con razón Ranma se estaba comportando tan raro con ella.
Tan... sexy y provocador, haciéndola perder la cabeza solo con el roce de sus dedos.
No.
Volvió a leer los mensajes que intercambió con sus hermanas esa mañana
Nabiki:Pero tu jefe no es Ranma Saotome!!? 🤔🧐
Kazumi:Akane, cariño, si estás incómoda regresa a casa. Tofú, los gemelos y yo estaremos felices de recibirte
Nabiki:Kazumi, es Ranma Saotome, la fantasía sexual de cualquier mujer🤤. No te atrevas a dejar tu trabajo, entiendes Akane.🙄
Kazumi:Nabiki!
Nabiki:🥺
Kazumi:Es casi acoso sexual
Nabiki:Kazumi te recuerdo que fue Ella quien lo 😘 le 🤮 y lo apostó y aún así él la invitó a salir.
Akane:Pues me rehuso. Solo voy a culpar al alcohol.
Nabiki:Si no lo quieres dámelo a mí 🤦🏼♀️ pero que no se haya aprovechado de ti estando ebria suma muchos puntos en mi escala
Akane:era lo menos que podía hacer
Kazumi: aunque la mayoría de los hombres no lo hubiera hecho, Akane. Estas segura de que no te gusta?
Ya no respondió. No pudo y sus hermanas debían entenderlo porque no insistieron en obtener una respuesta.
Cerró los ojos y se concentró en repetir su nueva mantra mentalmente.
Ranma Saotome no me gusta.
No me gusta.
No.
Cuándo demonios va a regresar Ranma?. Lleva fuera desde esta mañana cuando la odiosa de Kodachi Kuno vino a buscarlo para "reunirse con clientes potenciales".
Por favor, nadie le cree a esa bruja de pelo largo. Probablemente estén juntos en el asiento trasero de su estúpido auto. Debería haberle chocado hace tres días, cuando pude.
-Oye te llamo en un rato. Sí, ya dije que sí, joder.
Ranma aparece en nuestra oficina mientras está al teléfono. Lleva puesta una camiseta blanca y un pantalón deportivo gris.
Todavía no estoy segura de esto pero aún así no es momento de dudar. No tengo tiempo, ni ganas, de salir a buscar un hombre que me envíe flores y me sirva de escudo contra Ranma.
-Qué demonios?!-exclama al ver el ramo de rosas rojas en mi escritorio.
-Lo siento, señor-le respondo con fingida vergüenza levantándome mientras sostengo la nota que yo misma me he envíado esta mañana.-Las llevaré fuera de inmediato. De verdad, lo siento mucho.
Sí, tuve que gastar de mis pocos ahorros en las estúpidas flores pero solo con ver su rostro molesto bien lo vale. Y además te lo mereces por dejarme sola toda la mañana.
-Sácalas y pide a mantenimiento que venga. Soy alérgico.-La puerta de la oficina resuena cuando él sale.
Idiota.
Arrugo el sobre en mis manos y doy una mirada a las rosas.
-Ustedes son realmente inútiles.-pienso
La puerta se abre nuevamente. Ranma asoma su estúpida cara.
-Toma tus cosas, salimos en 10 minutos.-me dice y me obsequia una de sus mejores sonrisas.
Desde que lo conocí él parecía molesto con todos por alguna razón desconocida. Molesto con él mismo y siempre estaba bebiendo, gritando, tirando de mi paciencia al máximo... Yo no quería estar cerca de él y soporté su mal genio solo para no volver a casa derrotada.
Pero desde que estuvimos en la Isla juntos empecé a persibirlo de una forma totalmente distinta. Sus ojos, la forma en que él me mira desde entonces...la forma en que yo me siento cuando está cerca, como mi mundo se agita cuando sé que me está mirando.
Inhalo y exhalo un par de veces antes de seguirlo. Necesito convencerme de que él no me gusta.
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Una extraña manera de amar
Short StoryUn ceo frío y distante. Una asistente torpe. Un abogado gentil y agradable. Un sentimiento de amor no correspondido en varias direcciones.