A Hermione Granger le ocurrió algo horrible al final de la guerra contra Voldemort, y ahora está rota. ¿Ayudará su regreso a Hogwarts como aprendiz a curarla? ¿Qué se necesita para curar a Hermione, y en el proceso encontrará Severus Snape la curaci...
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Durante los días siguientes, las cosas se pusieron en su sitio para el comienzo del próximo curso. El proceso de entrevistas fue bien, y Hogwarts tenía una nueva enfermera escolar y un centauro que enseñaba Adivinación una vez más.
Madam Margaret Entwhistle iba a ser la nueva enfermera del colegio. Era una enfermera muy experimentada que, entre otras cosas, era la hermana de la profesora Sprout. La bruja era viuda; tenía el mismo pelo corto y gris hierro, la misma estatura rotunda y el mismo talante alegre que su hermana, y había sido una decisión unánime de todos los jefes de casa y del director contratarla.
Al parecer, Dumbledore había apelado a Firenze para que volviera a ocupar el otro puesto vacante. Pero claro, eso no afectaba a Hermione ni a Severus, ninguno de los dos tenía nada que ver con Adivinación, aparte de estar unidos en la opinión de que Sybil Trelawney ya no era apta para el puesto.
Por desgracia, Margaret Entwhistle sí les preocupaba; significaba trabajo para ambos. A falta de cuatro días para el comienzo del curso, había pedido un almacén de pociones medicinales casi nuevo. Emily e Isabella seguían en Francia, alojadas con Draco y Gabrielle mientras visitaban a su abuela, y Severus y Hermione esperaban poder escaparse ellos mismos. Sin embargo, parecía que no iba a ser así, ya que habían estado ocupados en el laboratorio de Severus casi todo el tiempo que las chicas habían estado fuera.
Ya era tarde y los dos habían estado trabajando sin parar para tener todo listo. "Tengo que decir que esta variante de bálsamo para quemaduras realmente parece ser mejor que la que usaba Pomfrey", declaró Severus mientras se afanaba sobre un gran caldero.
"Sí, todas las sugerencias de la nueva enfermera han puesto la enfermería más al día", asintió Hermione, sin poder ocultar más sus bostezos.
Esta era también su última noche antes de que las chicas volvieran, y el curso comenzaba mañana. Gremble no les había dicho que ninguna parte de las nuevas fincas de Severus estuviera lista para que la inspeccionaran todavía, y Severus empezaba a agitarse por ello, preguntándose qué pasaba. Miró a Hermione mientras ésta bostezaba una vez más. "Estas serán nuestras últimas pociones de esta noche", y su mirada se desvió hacia la extensa lista que se cernía entre ellos. Por suerte, la mayoría de ellas tenían una gruesa línea roja que las atravesaba, y con un movimiento de la mano tachó las dos en las que estaban trabajando. Sólo quedaban tres por elaborar; había sido un esfuerzo descomunal, pero ya estaban casi completos. Severus observó cómo Hermione empezaba a embotellar la poción en la que había estado trabajando, y recogió los frascos para la suya.
Finalmente, terminaron por esta noche, y ambos salieron del laboratorio a trompicones, agotados una vez más. Se dejaron caer en la cama de Severus, demasiado cansados para preocuparse de más cosas, y pronto estuvieron los dos dormidos, acurrucados juntos.
A la mañana siguiente fue cuando se puso difícil, como siempre. Hermione abrió los ojos para ver a Severus observándola en silencio con una sonrisa en el rostro. "Hola", susurró ella, con la voz aún muy dopada por el sueño.
