Inscribí mis materias, no había nada en el sistema, sí las clases ordinarias estaban del asco, esto estaba peor. Sin materias y con más hoyos quedaba mi horario preliminar.
Segun mi vida y mis planes jajajaja, las cosas estaban así:
Lunes, miércoles y viernes:
Contratos mercantiles Internacionales.
Práctica Forense de Amparo.
Derecho Militar
Hora libre (desayuno)
Práctica Forense de Fiscal
Medicina forenseEntraba a las 07:00 y salía a la 01:00
Nada mal, para tres días, los otros eran así.
Derecho Aduanero
Derecho Procesal AdministrativoEntraba a las 10 y salía a 1. Era eso o hacer un desmadre con el horario, que fue lo que hice al final.
Ingrese los nombres de los profesores en páginas de FB dónde dan referencias de los profesores y te das una idea de cómo será tu semestre. Había poca información y del último profesor, no había nada.
«Es nuevo, o quién sabe... Pero es Doctor, supongo que será un profesor raquítico, aún así lo daré de baja cuando pueda» hablé en voz alta.
Mi mamá me dijo: pues ya deja de quejarte y si vas a cambiar profesores, lo haces. Ya la siguiente semana inicias clase y déjate de tus cosas.
Suspiré y revisé mi horario, no estaba tan mal. Pero aún así iba a cambiar al de administrativo, eso dije y fue lo que no hice.
☁️🌙
Las cosas en la primera semana, eran las normales. Ir a clases, saludar a tus amigos, quererte regresar a casa, ver a los profesores y decir: me voy, lo dejo.
Eso era lo más sonado en los pasillos, en los salones, en la primera semana de clases, dónde vuelves a la rutina de despertar a las 5:00 am porque tú vives a dos horas de la Universidad, y sabes que vale la pena ... Porque estudias en la Facultad y no en otro campus.
Llegar temprano era un reto para mí jajajaja pero llegué, corriendo como siempre pero llegué, había escuchado referencias por mi amigo David, de la primera clase... Me pareció interesante y lo dejé, correr de edificio a edificio estaba aburrido, pero bueno. Me daba la excusa perfecta para llegar tarde a esa clase, Amparo. Profesor promedio y decidí dejarlo.
Mi primer día fue normal, ví a un par de mis amigos, Carmen y Daniel, tenía clase con ellos de militar. Porque estábamos los tres ahí y porque no había más cosas, decidimos dejarla... Suspiré y me fuí a desayunar con Daniel, para matar la hora libre.
De la clase de Fiscal huí, la maestra estaba loca... Hacer el ridículo con una obra de teatro, ya había hecho el ridículo en la prepa con un baile para pasar la materia de educación física (pensé que la reprobaba) y de ahí a correr a la otra clase. Medicina forense, un maestro viejo, era médico y dijo que sería interesante la clase, la dejé.
El día siguiente fue más relajado, entraba tarde pero eso no le quita que llegue tarde a mi clase. Eso de ver Criminal Minds con tu mamá a las 08:00 am y salir corriendo casi a las 09:00 am para llegar a la clase a las 10:00 (a casi dos horas de la Universidad) milagro fue llegar a clases, para que al final el profesor no llegará.
Hora y media me espere para la siguiente clase, iba decida a dar de baja al de Aduanero y al de Administrativo...
Llegué al edificio principal, salón D112. Iba con unas ganas de morir y salir de la facultad para regresar a mi casa. Entre al salón y vi, aun chico sentado en la mesa del profesor, «De verdad? Mandó a su adjunto ... Lo voy a cambiar, ni me dará clases el profesor...», pensé; me senté en las bancas del centro y mire mi teléfono para matar el tiempo y esperar a irme de ahí.
Éramos como 10 alumnos ahí, y fue cuando se levantó del escritorio.
– Bueno, vamos a empezar – me hizo dejar mi teléfono y verlo a la cara.
Oh my holy shit, él era el profesor. Llevaba un traje gris oscuro, corbata roja y playera blanca. Usaba lentes, cuerpo atletico, tez blanca y cabello oscuro; y sin barba, ojos color miel ...
Me dejó sin aliento, por primera vez, sentí atracción por alguien con tan solo verlo, es de esas veces que hay algo que te atrae de la persona y no puedes ignorarlo. Por más que quieras no puedes dejarlo de ver, y creo que a él también le pasó, porque cuando habló, se me quedó viendo.
– Es la clase de Derecho Procesal Administrativo, pasaré lista y me dirán algo de ustedes, de qué semestre son, trabajan o estudian, a que se quieren dedicar cuando salgan de aquí, ya saben esas cosas – se sentó en la silla y paso lista.
Uno a uno, iba hablando, hasta que llego a mi nombre, escuchar mi nombre con su voz hizo estragos en mi, empezando el semestre y yo ya con un problema muy serio: Me gusta mi profesor de Administrativo.
Hable lo que dijo y listo, paso al siguiente, pero cuando lo dijo, sonrió, sonrió y yo le devolví la sonrisa. Sería un semestre muy interesante para mi, entre tratar de no babear por él cuando me diera clase y poner atención en clase.
– Bien, les diré cómo voy a evaluar y la próxima clase empezamos con el tema – habló después de que pasará lista. Yo saque mi libreta y anote la evaluación, no estaba tan pesado pero tampoco sería lo más fácil del mundo.
La clase termino y yo salí del salón, estaba decidida a dejar la materia por mi profesor, porque me gusto el profesor, es tonto y hasta estúpido dejar la materia porque el profesor está guapo, pero lo hice.
Deje la materia que dije que iba a quitar, y lo hice solo porque me gustó el profesor.
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C'est une aventure
RomanceMi último año de universidad se fue a la mierda, tanto por la pandemia como por mi vida amorosa. Si bien siempre fui la chica común y corriente, la que siempre iba corriendo a clases, la que a veces no entraba a clases por irse a desayunar con amigo...