Back to School

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Parecía ayer cuando se despidió de Niall, aquel día en que el viento se mostraba salvaje y el cielo parecía enojado y a punto de desquitarse con los mortales. Nadie parecía inmutarse ante aquel suceso, nadie parecía darse cuenta de que Dios quería que se dieran cuenta de que Él estaba ahí observándolos, y que en cualquier momento descargaría la verdadera ira sobre ellos.

A ella solo le quedaban unos días para regresar al internado, cuando su madre se percató de que el jarrón había sido guardado en un escondite que ella reconocía. Se encontraba en su habitación leyendo una de esas revistas que hablan de vanidades.

-Maria Antonieta Souze!

A Maria se le vino a la mente un millón de cosas que había hecho que a su madre no le gustaba que hiciera mientras ella estaba ahí. Como verter su yogurth de fresa en las macetas o caminar con sus calcetines por toda la casa... y el jardín, de esta manera lo anterior enfurecía a su madre como no tenía idea. Bueno, en realidad si la tenía, pero a ella no le importaba. su madre dió un portazo mientras entraba colérica a su cuarto.

-Por que tan molesta mujer? Contestó mientras seguía hojeando su revista.

-Cómo que por qué tan molesta, ya se lo que hiciste y esta vez tu padre no te va a defender!

-Oh vamos no es tan grave- Su madre puso una cara peor a la que tenía, se sentó en su cama y cerro la revista- Esta bien. No fue del todo mi culpa, Andrew empezó con todo ese rollo y me retó. Además de que no se supone que pueda relacionarme con el sobrino de la directora. Pero ya pasó, solo es una supensión menor. El señor Collner está bien y el adhesivo le quito los bellos desagradables de las orejas... y el bigote y, talvez una parte del cabello de su nuca. Pero aceptémoslo va a crecerle. Y de seguro que lo hará. Alguna vez te he dicho que parece el hijo de King Kong? quién lo creería.- Al ver que el rostro de su madre tornaba a una expresión más severa y sorprendida- Y yo no empecé la pelea con Ruth, ella fue la que me lanzó ese bote de yogurth de fresa caducado, así que en mi defensa tuve el derecho de tirar el primer rasguño. Tu sabes cuanto odio esa leche fermentada y caducada con sabor a fresa, los trocitos me dan asco y el comer yogurth me acuerda a los animalitos des-componedores de leche que contienen. Y me pregunto, que le harán a mi estómago?! Y sabes que no soy una persona que pueda vivir con la intriga de algo..

-Maria Cállate!

-Por qué?

Fue en ese momento en el que se dió cuenta de que su madre traía un pedazo del jarrón, del que ya no se acordaba, en la mano. SantaMierda. Había hablado de más. Ese era un defecto enorme.

-Perdón?-Sus intentos de reparar lo que había hecho eran en vano- Aquí es el momento en el que nos reconciliamos con un abrazo mientras cantamos AllYouNeedIsLove?- Su madre endureció la mirada- Puedo llamar a papá?

-No esta vez querida. La sonrisa de su madre le provocaba un cierto escalofrió y entumecimiento en sus dedos. Así que decidió esperar a que su madre soltara toda su furia.

-Que hacía el Jarrón en el baúl de tu abuela?!

-Tenemos un baúl de la abuela? Y por qué no se lo hemos regresado?

-Oh vamos, inventate una mejor excusa! Haz escondido cosas ahí desde que eras niña. Como mi lampara de la segunda guerra mundial!

-Ese fue Niall. Y no fue del todo mi culpa. El me incitó a jugar dentro de la casa sabiendo lo mucho que odiabas eso.- Su madre se quedó ahí seria recargada en el marco de la puerta- Ya sulta mi condena Jack Bauer.

-Nada de celular, computadora, revistas- QueNovedad- Ropa nueva, y tendrás que llevar a tu hermano lo que te queda a la escuela y recogerlo. Además limpiaras la tierra de las macetas, lavaras, arreglaras y sacudiras el ático, Y no volveras en vacaciones de primavera.

PhotographDonde viven las historias. Descúbrelo ahora