𝔼𝕝 𝕚𝕕𝕚𝕠𝕥𝕒 𝔻𝕖 𝕄𝕚 𝔼𝕩 (Dramione)

2. Compañeros

No recordaba cuando fué la última vez, en la que había podido dormir tranquilamente, sin que cierto hurón albino esté fastidiandola hasta en sus sueños...

Vio como la luz se colaba por la ventana y supo que era tiempo de ir a desayunar.

Otro día... otro intento por esquivar al idiota de su ex.

Bajó al gran comedor a rastras del brazo de Ginny, sabiendo lo que la esperaría.

Algún otro intento por parte de Draco Malfoy por llamar su atención.

Cuando llegó al gran comedor todos estaban riendo a las carcajadas por la enorme pancarta que levitaba en medio del salón.

"Sabes que no puedes resistirte a mi, vuelve conmigo, o te esperarán más pancartas como esta"

Ginny rió a las carcajadas mientras que la castaña hacia una mueca de fastidio.

¿El idiota estaba recibiendo clases particulares de los gemelos?

Bueno, no le sorprendería, ya que se volvieron muy amigos, después de que salvara a Fred de morir.

Lo que siempre le pareció irónico, era la destreza y habilidad de esos gemelos para mantener su relación de amistad con el blondo, totalmente hermética a su familia, y que estos jamás hayan sospechado al respecto.

Hermione rodó los ojos saliendo de su breve reflexión para posarlos en el platinado que caminaba con sus amigos, Theo y Blaise, mientras entraban en el Gran salón.

Los tres rieron al ver la pancarta.

-Mira eso, "el misterioso botado", sigue haciendo de las suyas para que la misteriosa chica, lo perdone.- se rió Blaise.

-Si fuera ella ya lo habría perdonado por insistente, ya son tres semanas igual...- aportó Theo.

-Muero por conocer la razón de su ruptura para empezar, el chico debe haberla cagado mucho.- dijo Blaise.

-O la chica debe ser muy terca...- comentó Draco mientras pasaba cerca de la Gryffindor.

Está se giró para mirarlo de reojo

Y él, le dedicó una sonrisa y mirada de picardía, mientras arqueaba brevemente sus cejas como insinuación.

Hermione suspiró haciendo una mueca de hastío, y se fue a sentar con Ginny hasta la mesa de su casa, donde se dejó caer en su asiento.

-¿No es romántico?.- dijo Lavander.

-Son tres semanas ya, ojalá que lo perdone.- opinó Parvati.

-No lo sé, parece que la chica es muy terca.- picó Ginny mirando de reojo a Hermione.

-O el tipo muy idiota.- respondió Hermione cortando el pan con la mano.

-A mí me parece un pesado, ya tendría que parar...- bufó Ron, con la boca llena de pollo.

-Yo creo que eso dependerá de las razones por la cual se separaron en primer lugar.- reflexionó Harry, mientras se servía un trozo de tarta de calabaza.

-Pero pareciera que en verdad la quiere mucho... Y sea lo que sea, parece arrepentido.- intervino Neville inocentemente.

-O la ha cagado de forma monumental.- opinó Dean Thomas.

-Creo que es muy dulce...- aportó Luna, que se había colado, para desayunar con los leones en su mesa.

-Pues sigo pensando que es un pesado.- volvió a decir Ron.

Hermione rodó los ojos ante los comentarios de los de su casa y siguio con su desayuno.

Ignorando incluso, las molestas miraditas que le hacía Ginny.