Capítulo 27

141 18 5
                                    

3 meses después.

Con Ruggero va todo muy bien, el me ama como yo a él. Pretendemos casarnos aquí mismo con sus padres y amigos, ya que mi familia no lo aprueba, pero tengo que hacer unos trámites y eso demora mucho tiempo.

Rugge está trabajando en una empresa parecida a la mía, bueno que era mía... no tiene un puesto tan alto, pero gana mucho, yo no trabajo pues Ruggero no quiere que lo haga y pues no me molesta así le cocino y estoy pendiente de la casa, aunque sea un asco en la cocina.

¿James? Bueno, me he tenido que cambiar de casa ya 3 veces, he escuchado 4 conversaciones de él y valentina a veces hasta mi papá junto a ellos.

La pobre está amenazada, me siento tan mal, valentina no tiene que pagar por mi culpa ya le he dicho que confiese y diga toda la verdad, pero se niega a decirles algo, dice que no le importa nada... aún tengo susto por James, lo veo por todas partes es como un ¡puto fantasma! he tenido muchas pesadillas, él dijo que donde encontrara a Ruggero lo mataría ¿Cómo no asustarme? Conozco a James tanto... que sé que es capaz de cumplir su amenaza.

Mi familia me odia, a excepción de mi hermana... se ha contactado conmigo hace una semana y dice que está muy orgullosa de mí, que lo que hice estuvo muy bien ya que a ella la casaron a la fuerza, la única diferencia es que ella no amaba a otro, con el tiempo se terminó enamorando de él, pero ¿yo hubiese podido? No, definitivamente no yo amo a Ruggero... lo amo.

— ¡llegue! —dice rulitos abriendo la puerta

Camine hasta la entrada— hola mi amor—lo bese

—hola amor de mi vida—me abrazo— ¿Qué es ese olor?

—la cena— reí— espero que este mejor que el resto de comida que he hecho

— ¡pero si las otras estaban riquísimas!

—no mientas—le pegue con el codo— ¡estuvieron horribles!

—un poquito...

—Rugge, vomitamos toda la noche

Soltó una sonora carcajada— buen punto

No era buena cocinera... de hecho jamás en mi vida cocine. La mesa estaba puesta, y solo nos sentamos a comer

— ¿Quién prueba? —pregunte

—tú...

—no, mejor tú

— ¡tú cocinaste! ¿Por qué tengo que morir yo?

Lo mire ofendida— ¡que feo! Pero como soy valiente comeré

— ¿acaso yo no? ¿recuerdas lo que he hecho?

—okey—levante mis manos en forma de rendición—has ganado tú—lleve un poco a mi boca y lo escupí—¡delicioso! —dije sarcásticamente

Rio a carcajadas—a ver, a ver— llevo un poco a su boca y emitió mi acción—¡qué asco!

lo miré frustrada y melancólica— ¡insensible! —me fui a la sala de estar llorando

— ¡karol! Amor espera, yo no quería...

—no... no

Me abrazo—tranquila, perdóname por favor

Lo abrace— perdóname tú a mí, me frustra no poder hacer nada bien...

Acaricio mi cabeza—no me importa karol, aprecio mucho todo lo que haces

— ¡pero me queda mal —me queje como niña pequeña

—no me importa...

—pero...

Rio y me hizo callar—podemos pedir algo para comer...

—no hago nada bien

—como que no, el amor lo haces de maravilla— me beso

Me sonroje inmediatamente— ¡tonto! —lo golpee levemente

—sí quieres podemos probar y te digo como te sale— me miro coqueto

—Ruggero— mi mejillas estaban calientes y supe que tendría que estar roja como un tomate— ¡no digas eso!

— ¿no diga que? —se hizo el destendido— que me encanta como me montas o como te mojas cuándo... —tape su boca más qué muerta de la vergüenza, lamio mi mano y reí

—basta— bese suavemente sus labios— vamos a pedir algo para comer


——————

— ¿Qué harás hoy? —pregunto Ruggero arreglando su corbata

—saldré, no cocinare nada—reí levemente

—okey hermosa— beso mi frente—me voy

—adiós mi amor— lo bese

Ruggero salió y a los minutos yo igual, tenía algo de dinero así que compraría ropa y otras cosas.

Una hora después estaba sentada en una cafetería agotada. Mis pies se iban a explotar en mis zapatos, pedí un pastel de nutella; es de mis favoritos.

A los minutos llego junto con mi frape y me dispuse a comer, hacia mucho no sentía tranquilidad. Todo con James se había vuelto montóno y aunque sé que eso no justifica mis infidelidades, no sé como dejar que su recuerdo me atormente.

Temó que de un momento a otro el dañe mi burbuja y cruel y dura realidad me golpee, pero sé que tarde que temprano sucedera.

Sólo espero estár preparada.

un hombre me miraba mucho, este también estaba solo... me miraba como si me conociese, me limite a blanquear los ojos y ignorarlo hasta que a los diez minutos se acerco

—hola ¿te conozco? —afirmo más que pregunta

Lo mire— no lo sé, nunca te he visto ¿por qué?

—no lo sé, acostumbro a ver chicas lindas entonces pensé...

—Conmigo no resultan los piropos, te haz equivocado de chica

Me miro analizándome— karol, karol Sevilla ¿eres tú?

lo mire con fastidio— sí, soy yo...

me abrazo de repente— ¡Dios! Mi vida... sigues con esa mala memoria

levante una ceja— ¿quién eres?

—Jorge, Jorge Blanco

Oh por Dios... realmente era él, Jorge fue un ex novio con el único que hablé de matrimonio futuro... con James lo hice, pero obligada

—realmente lo siento—dije avergonzada

—no te preocupes, la última vez que nos vimos solo teníamos dieciséis—dijo sonriendo

Junto a él dure un año o año y medio, terminamos porque él tenía que irse para otra colegio y así...

— ¿y que ha sido de tu vida?

— ¡problemas, muy largo! Y ¿la tuya?

—mi novia termino conmigo hace una semana—rió— ya ni la quería

Reí— y ¿Qué haces aquí?

—trabajo aquí en Italia, ¿y tú?

— ¡larga historia! —reí

Miro su reloj— tenemos mucho tiempo aún...

Le sonreí y proseguí a contarle mi larga historia. Tal vez si no hubiese terminado con él, nunca hubiese salido con James hasta el punto de casi casarme, pero si hubiese estado con Jorge, nunca hubiese sucedido esto con Ruggero... y realmente amo todo lo que sucede ahora, no me arrepiento, aunque eso cueste mi vida.

.
.
.
.
.
.
.
.
.

La meta es 10 votos y 25 comentarios.

By: Majo

Sólo una noche [Ruggarol Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora