boy or girl, what do you think?

274 26 3
                                    

Pov's kit

– Dame un poco de eso– saco un poco de fresas con chocolate– que delicia–.

– Oye déjame un poco– Beam me quita y come todas las fresas posibles– Demonios wayo sabe elegir–.

– Obvio. – río y bebo un poco de jugo– que crees que sea–.

Beam sonrie y come otra fresa, esta duda la tenemos desde hace tiempo, aunque Ming con su instinto de "Madre" dice que será niño.

– Es obvio que uno en el embarazo engorda un poco... pero wayo... el tiene una panza muy grande– levanto una ceja sin entender– mellizos, deben serlo.

Río negando, claro que no. El crecimiento de volumen debe ser por los antojos más que nada... uy... ¿me pasara lo mismo?.

– Bien... pues yo creo que es niña, tiene la panza más redonda.

– Lo que digas doctor, pero adivina quien ya pasó ovulación y partos– me guiña el ojo y rie llendose.

Niego y entro a la casa de wayo, es muy grande y espaciosa. Aquí nuestros hijos podrían jugar, crecerán como hermanos.

Pongo mi mano en mi vientre un tanto abultado.

Papá aun no sabe de ti pequeñito o pequeñita, pero juro que hoy se entera.

– Ya te dije ming– algo mi mirada y me pongo detrás de la pared– ella se demora en llegar– ¿"ella"?–.

– No interesa llámala, necesito que ella esté acá, no aguanto ningún segundo más– Qué...–.

– Bien la llamaré, ahora ve con kit que de seguro ya te extraña.

– Lo que sea, pero necesito que ella llegue.

Mis ojos se cristalizan, y voy rápido hacia fuera.

Sabía que nunca cambiaría, sabía que el seguiría siendo un mujeriego.

No le importo, y menos... le importara mi bebé.

Un fuerte dolor en mi vientre me hace caer al suelo.

– ¡AH!– sollozo y Beam junto con Wayo se acercan rápido a mi–.

– ¡KIT! Qué... qué te pasó...–dice Beam preocupado.

Yo solo lloro abrazando mi vientre.

– B..Beam hay sangre– Wayo asustado apunta mi ropa–.

– ¿Kit?...– Quita un poco de cabello de mi cara–.

– Tengo solo 1 mes... – mi corazón dolía, ¿esto será el destino?, ¿mi bebé no debe nacer?.

– K...kit que te pasó–la voz de Ming acaparó mi mente– QUE TE PASÓ– toca mi casa y ve la sangre– dime kit por favor, debemos llevarlo al hospital.

Ming me levanta y me lleva a la camioneta, Beam y wayo se suben a las de pha y Forth siguiendonos.

No siento nada... nada y me da miedo de que en mi interior también esté esa sensación.

Uno minutos después llegamos al hospital de urgencias, más enfermeras al ver mi situación rápidamente colocaron suero y me llevaron a una sala de ultra sonidos y demás.

– Señor, cuantos meses tiene– dice poniéndome el gel en mi vientre–.

– Un... un mes– asiente y revisa en la maquina–.

Por un instante no escuché los latidos de mi bebé, pero de un segundo a otro comenzaron a sonar.

Mis ojos volvieron a llenarse de lágrimas y miro la pantalla.

Jamás me rendiré Donde viven las historias. Descúbrelo ahora