Su boca se encontraba seca y en sus débiles manos se hallaba su vaso con agua. Louis sentía como su cuerpo cada vez estaba más debilitado por el cáncer y por ende, su humor no era de los mejores.
Se encontraba en el ala de recreación mientras miraba por la ventana como la lluvia caía por las calles de Londres, como lo era habitualmente en esa época en Inglaterra. Aquella sala estaba llena de niños jugando entre ellos y con sus juguetes, riendo y pasando aquel día de la mejor forma posible. También se encontraban personas mayores conversando entre ellos mientras jugaban al bingo o a las cartas y reían por las anécdotas que contaban.
Louis apretó sus labios y un suspiro salió de su nariz. Tal vez era por el día lluvioso o porque se sentía más cansado de lo normal, pero su ánimo no era de las mejores. Habían pasado dos días del incidente de la capilla, y desde entonces solo pensaba en las cosas que pasaron en las últimas semanas, o al menos ese día que se sentía... distinto, nostálgico.
Ya no estaba enojado, sentía que esa fase en él ya había concluido y mientras le daba un sorbo de su agua, recordó lo que Miedo le había dicho que tal vez estaba en lo cierto: la contemplación que sentía en aquel día, recordando lo que vivió en esos días, reforzaban el miedo que tenía de morir pronto. Todavía no estaba listo.
Ahora con cinco días de vida, sentía su estómago doler cada vez más y se veía a sí mismo consumido por la soledad, y en cierto punto, era triste para Louis que su vida terminara tan rápido con él siendo tan joven.
Dejó su vaso con agua en una mesa cerca de él, tomó las ruedas de su silla y comenzó a dirigirse hacia su cuarto. Mientras avanzaba hacia su cuarto, vio a lo lejos a una chica que abría unos regalos mientras dos globos gigantes detrás suyo con el número uno y a su lado el número seis, mostrando que estaba celebrando su cumpleaños con muchas personas, deduciendo que eran sus familiares.
Pasó saliva luego de voltear su mirada y salir del lugar.
El sonido de unos ronquidos de parte de John hizo que Louis se despertara gruñendo. Pasó sus manos por su rostro para poder quitarse algunas legañas.
Cuando se acomodó en donde estaba acostado, un ligero dolor en su pecho se instaló en su cuerpo, haciendo que un pequeño gemido saliera de sus labios. Se tocó la zona donde le causaba aquel malestar, pensando que fue por la posición en la cual durmió. Segundos después notó que estaba en el sofá de la sala, y en el suelo estaban sus amigos y gente que no conocía, durmiendo allí.
Se sentó en el sofá y cuando apenas bostezó, aquel malestar se intensificó. Se tocó nuevamente aquella zona y bufó cansado, prometiendo que no volvería a dormir ahí apenas regresara de una fiesta. Caminó hasta la cocina y tomó una pastilla que se encontraba encima de aquella pequeña isla del lugar y la tomó sin chistar.
Escuchó los murmullos de Stephan, quien soltaba insultos hacia las personas que se encontraban en el suelo, haciendo que Louis riera levemente antes de tomar su agua. El rubio caminó hasta donde estaba el castaño y le quitó la botella de agua de sus manos.
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my famous last words (welcome to the black parade, little boy) | l.s [✓]
Fanficcentric!louis ── ¡Bienvenido seas al desfile negro! Sólo recuerda esto: Tu paso en la vida deja una huella. No importa las cosas buenas o malas que hiciste, haremos que tu recuerdo siga hacia adelante. ¡Lo llevaremos hacia adelante! ── [Basado en el...