Una helada brisa soplaba sobre su cuerpo, congelando su piel de tal manera que hasta podía sentir sus huesos; el lado izquierdo de su rostro se encontraba sobre el suelo, humedecido por el lodo; con su ojo derecho observaba a su alrededor, sin poder recobrar la razón por completo, e intentaba divisar algo a la lejanía en la penumbra. Sus piernas dolían y, tal vez, era ese mismo dolor el que lo mantenía despierto. Era inconfundible el sabor a sangre que tenía en su boca, también la sensación de ardor en su piel sobre algunas zonas de su cuerpo que indicaba las obvias heridas. No estaba muy seguro de dónde estaba o qué había sucedido, pero sí sabía con exactitud que su condición física no era del todo favorable.
Empezó por mover sus dedos, índice y anular, de la mano que se encontraba tendida en el suelo, frente a su rostro, lastimada, la cual estaba tan cerca de su nariz que hasta los detalles de su piel podía distinguir, incluso con tanta oscuridad. Al inicio no consiguió sentir nada debido al helado clima, sin embargo, en cuanto comenzó a rasgar sus uñas entre la húmeda tierra, las sensaciones llegaron a él en un instante. Frunció un poco su ceño, percibiendo dolor en su rostro también, y tragó saliva, la cual poseía un fuerte sabor a sangre.
Ansió ponerse de pie y, con mucho esfuerzo, luego de varios intentos fallidos, lo logró. Ambas rodillas se encontraban en un estado deplorable, se trataba de un dolor que no había imaginado ni en su peor pesadilla. No pudo erguirse, pero sí comenzar a avanzar de a poco hacia aquella luz a la lejanía, tambaleando y tropezando en el camino.
Una vez dado varios pasos, algo que pesaba sobre sus hombros cayó al suelo. Cuando la extraña curiosidad por saber de qué se trataba invadió su pecho, se dispuso a darse la media vuelta para observar lo que se encontraba detrás. Aquello que había caído de su cuerpo parecía una especie de chaleco. Pudo ver un puente de gran tamaño, bastante deteriorado, derrumbado en varias columnas, y a lo lejos, una nube de humo que se hacía notar, su intuición le decía que era algo consumiéndose en las llamas, ¿tal vez un accidente? ¿Por qué su mente se sentía como una laguna?
Una voz en su interior le decía que debía seguir avanzando hacia la lejana luz, no mirar más atrás, porque aquello que estaba viendo le transmitía claramente peligro; y fue eso lo que hizo. Su cuerpo parecía moverse de forma automática, como si estuviera programado para continuar sin detenerse, incluso a pesar de que su cabeza se sentía a punto de estallar y su consciencia pendía de un hilo débil y desgastado. En cualquier momento podía volver a caer desmayado o al fin muerto, sin fuerza alguna, pero seguía.
Sin embargo, la claridad tan lejana que había visto antes no era otra cosa más que una luz tenue bastante cercana y a punto de apagarse, lo que su mente malinterpretó como una larga distancia. De alguna forma sintió alivio, pudo notar lo que parecía una calle pavimentada de siglos pasados, como solo en los libros había visto, pero esta se veía deteriorada. Entre la penumbra, unas lámparas pequeñas marcaban un camino hacia lo que aparentaba ser una zona habitada. No sabía muy bien si se trataba de la realidad o un sueño, tampoco estaba seguro de si era lo correcto avanzar, pero era su única opción y necesitaba pedir ayuda.
Caminó lo que, para él, fue una eternidad, pero que en realidad fueron un poco más de cien metros; sin embargo, dada su pésima condición física, se trataba de un logro notable. Vislumbró sombras que parecían siluetas, escuchó voces masculinas y fue en ese instante que sus sentidos se agudizaron un poco más, entró en razón por un momento, suficiente como para poder gritar y darse cuenta de que no, definitivamente no estaba soñando. Sin embargo, aquel grito le costó demasiada energía, porque al instante su visión se nubló y tambaleó hasta impactar su hombro contra la pared de una de las construcciones más cercanas de su lado izquierdo. Pensó que estaba a punto de perder la consciencia otra vez, pero, solo con escuchar los pasos de esos desconocidos aproximándose hacia él, sentía fuerzas. Podía oír una conversación que se volvía cada vez más nítida.

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La Cúpula de Seúl [서울 돔] • ChangLix
Fanfiction¿Heterocromía? ¿Una ciudad que esconde muchos secretos? ¿Una solución que podría detener el caos mundial? ¿Un chico presuntamente inocente? La Cúpula de Seúl parecía un lugar maravilloso para vivir, resultado de la famosa paz global que nació luego...