El Socio De Papá (+18)[1]✔️

Capítulo 9

Bet

Salí de esa oficina temblando. Literalmente mis piernas temblaban del placer que me hizo sentir y del placer de verlo a él así. Disfrute como nunca antes hacer a un hombre sentir placer y fue completamente increíble.

Recosté mi espalda en la pared del pasillo. El corazón latiendome fuerte y rápido. Cerré los ojos con fuerza y al abrirlos tenía a alguien al frente.

—Betany Spencer— dijo su varonil voz.

Me hice a un lado escapando de su mirada y le sonrei con vergüenza.

—Señor Smith

Era Edward, el hijo de los Smith, justamente ahí, ¿Por que?

—Que lastima que no tuve el placer de convivir más con usted el día de la cena— empezó a decir.

Se acercó así que di un paso hacia atrás.

—Si, lamentablemente, tuve que irme temprano.

Dio un paso hacia mi, así que di uno en reversa.

—No quisiera ser atrevido— dijo— pero me gustaría tener la oportunidad de conversar con usted en privado...

—Vaya— solté una risa nerviosa —¿Por que? Si no nos conocemos nada...

Dio más pasos hacia mi así que retrocedí más y cuando me di cuenta estaba en la puerta de David. Me arrecoste a ella y la toque con el ritmo que mi papá usaba.

—Por lo mismo— estiro su mano en mi dirección

De inmediato pensé en lo que acaba de hacer con mis manos y me moría de vergüenza. ¿Como podría darle la mano así?

Sonrei con vergüenza y justo cuando saque la mano de detrás de mi cuerpo la puerta se abrió y casi caigo encima del pecho de David.

Miró de mi a Smith y permaneció impasible.

—Smith— lo saludo—Ahora que te veo, necesito que hagas algo— dijo mirándome— con permiso..

Sin más se metió de vuelta a la oficina y yo le sonrei a Edward.

—Lo lamento, tengo que volver a trabajar, es un gusto haberte visto de nuevo

No le di tiempo a decir nada y escape metiéndome en la oficina de David. Lo vi de pie en medio de la oficina, con una sonrisa ladina.

—Solo dame un minuto para que se vaya— le dije.

Meneo la cabeza, entre complacido y divertido. Me quede ahí solo mirándolo, sin poder apartar mi mirada de la suya, con las manos detrás de mi cuerpo. Sentía que me picaban las ganas de volver a estar cerca de él y hacerlo sentir bien, pero pasado el minuto camine de vuelta a la puerta.

—Adiós.

David se despidió desde el centro de la oficina, yo solo salí y me fui directo al baño a lavarme las manos y asearme un poco, luego fui a mi oficina y pasé ahí el resto del día.

Al salir de trabajar me fui a mi casa. Papá saldría con Samara asi que estaría sola, me relaje por un buen rato en mi bañera y estando aún ahí entro una llamada a mi teléfono que conteste inmediatamente.

— ¿Hola?

— Hola

Esa voz tan familiar que me ponía la piel de gallina se filtro a través del teléfono.

—¿Pasa algo?

—Teniamos un trato—empezó a decir — solo cuando ambos queramos y espero que quieras, porque voy a pasar por ti en exactamente 10 minutos, no tienes opciones, me dejaste jodidamente mal.