𝑭𝒐𝒓𝒃𝒊𝒅𝒅𝒆𝒏 𝑳𝒐𝒗𝒆 ♡ || Madelaine Petsch And You ©

Episodio 24

POV TN
Luego de comprar la comida, bueno, solo pedí hamburguesas veganas ya que Madelaine no consume proteína animal. Subí con la orden, mientras Diego me ayudaba a llevar todo, él también había pedido hamburguesa.

TN: gracias D- sonreí de lado -ve a comer, me avisas si necesitas que te acompañe de nuevo al restaurante, o no se, si necesitas mi ayuda ya sabes- susurré, el asintió para luego darme un beso en la mejilla.

Diego: lo único que necesito es un buen chongo, pero no encuentro a nadie- susurró con una mueca chistosa, reí mientras negaba -bueno bueno, entra y hazle el amor a tu pelirroja.

TN: debe estar dormida, tengo que levantarla para que coma- susurré, el rió -bueno, ahora sí ya me voy perra- deje un beso en su mejilla y entré al cuarto.

Cuando entré, coloqué la bandeja en el meceser. Fruncí mi ceño al ver a Madelaine sentada, enfrente del televisor el cual estaba apagado, ella tenía el control en manos. Me acerqué a ella y me senté a su lado.

TN: ¿Esta todo bien?- susurré, solo escuché como sorbía su nariz, la abracé pero ella se alejó -¿Que pasa?- pregunté.

Mads: ¿Qu-Que hiciste todo el mes que estuviste en Canadá?- preguntó, trague grueso y empecé a jugar con mis dedos -dime.

TN: ¿Para que deseas saber eso, pelirroja?- pregunté, ella se levantó, luego me miró fijo, podía notar el enojo o decepción en sus ojos, me preocupé.

Mads: ¿Que hiciste?- preguntó, me levanté quedando a su lado -dime porfavor, ¿Me dirías la verdad?- susurró, asentí mientras una mueca de preocupación se formaba en si rostro.

TN: fui a lo de mi hermano, tuve problemas con mis padres, tuve que ir al psicólogo, conocí a Diego e iba casi siempre a entrenamientos o yoga, todo normal- susurré, mientras sobaba sus brazos.

Mads: ¿Porque lo hiciste, TN?- preguntó con sus ojos llorosos, me acerqué y fui limpiando sus lágrimas, pero ella alejó su rostro.

TN: ¿Que pasa? ¿De que hablas, cereza?- susurré, ella se acercó al televisor, luego lo prendió dejando ver un vídeo, en donde estaba yo en la sala de la clínica dónde me traté este mes con la psicóloga.

Mads: ¿Sabes de que se trata este video?, ¿Sabes que pasa?!- dijo al borde del enojo y frustración, fruncí mi ceño y me senté en la cama.

TN: no, claro que no lo sé ya que tuve muchas sesiones con la psicóloga- susurré, ella se apartó del televisor para luego reproducir el video.

-Video-

Martina: un, dos...tres- chasqueó sus dedos -solo relájate TN, déjate llevar ¿Bien?.
TN: si, es-está ella ahí, Martina- susurré.
Martina: bien, eso es perfecto- se arregló en su asiento -TN, suspira y sueltate. Dile todo lo que sientes, vamos chica esta es tu oportunidad de sacar todo lo malo que te persigue desde que me hablaste de ese audio.
TN: ere-eres una mala persona- dije nerviosa.
Martina: vamos TN, ella no es real, solo está en tu mente pero sabes que te puede ayudar así que dile todo lo que sientes. -pasaron unos minutos, y al fin hablé.
TN: eres una...una mierda, no te importa nada, lo peor que pude haber echo fue quedarme en esta casa, si hubiera sabido que una persona como tú me trataría como una porquería hubiera preferido mil veces morirme de una vez a seguir recibiendo el desprecio de todos, no sabes cuánto estoy logrando odiarte, cada día que pasa me alegro de no tenerte cerca, me alegro de no verte y ojalá no te vea nunca más en mi maldita vida, porque personas como tú son las que menos deseo, Madelaine Petsch- dije enojada, juro que no sabía todo lo que decía, horas antes de eso mi papá me metió en la cabeza que no me merecía a nadie, por eso fui directo con la psicóloga.