𝑭𝒐𝒓𝒃𝒊𝒅𝒅𝒆𝒏 𝑳𝒐𝒗𝒆 ♡ || Madelaine Petsch And You ©

Episodio 32

Omnisciente.
La tensión era muy notoria, hablando claramente en lo sexual. Pues Madelaine y T/n se encontraban en el sofá, 'viendo una película', aunque en realidad, toqueteos y besos apasionados eran los presentes. Madelaine encima de T/n, ambas disfrutando los roces de sus cuerpos, las manos de Madelaine posadas en los hermosos senos de T/n, a la vez que T/n posaba sus manos en el trasero de su novia.

Los jadeos de T/n se hicieron presentes, ruidos de placer aún más pronunciados. Madelaine amasaba con lujuria los senos de su novia, mientras tomaba control en el beso apasionado que había formado, ahora se encontraba succionando la lengua de su novia, a su gusto. Decker juraba tener un orgasmo al ver el control que había tomado Madelaine sobre ella. T/n estaba totalmente sorprendida al ver el estado en el que estaba Madelaine, pues la pelirroja aunque se haya mostrado necesitada en momento de lujuria junto a T/n, esta última nunca había visto el lado tan dominante de Madelaine.

La pelirroja parecía querer devorar a T/n. Petsch nunca había sentido esto, nunca había estado tan necesitada de alguien en el sexo. Pero con T/n es distinto, con T/n tiene ganas de todo, quiere las caricias de Decker a cada hora, quiere que T/n le demuestre cuan sexy puede llegar a ser para sus ojos. Madelaine ama a T/n, pero cuando el momento de pasión llega a ambas, Petsch no puede controlarse al tener al frente a su fruta prohibida, solo piensa en devorarla y ser devorada.

T/n: ¡Mads!. . . —Jadeó, con la respiración muy entrecortada.

Madelaine no hizo caso, y siguió devorando en cuello de su novia, mientras sus manos aún seguían en los pechos de T/n. Disfrutando ambas del tacto, y de sus cuerpos unidos entre sí.

T/n: ¡Ahhh! Dios ¡Si! —Gimió, al sentir como Madelaine estimulaba ahora su intimidad.

T/n removiéndose entre las manos de su novia, la cual estaba contesta al ver lo que generaba en T/n. Ambas con lencerías extremadamente sexys, escogidas por Petsch.

Las manos de T/n no se quedaban atrás, pues ella también aprovechaba la piel expuesta de su novia, y sensualmente dejaba caricias. Primero marcando el pecho de su pelirroja, saltó sus senos y pasó inmediatamente a sus pliegues, donde comenzó a estimular la intimidad de su novia, logrando así que la pelirroja se mueva de adelante hacia atrás, restregando se en la mano de T/n, mientras seguía estimulando los pliegues de esta última.

Madelaine: te deseo tanto, mi amor —Gimió, con sus ojos cerrados y aún moviéndose sobre la mano de su novia.

T/n: ¿Quieres que te haga el amor? —Susurró mientras besaba el cuello de Petsch, y se sentaba, dejando a la pelirroja en su regazo.

Madelaine: No. . . —Negó en respuesta, haciendo que T/n la miré confundida— Quiero yo hacerte el amor a ti. Que seas completamente mía, quiero hacerte gritar mi nombre. —Susurró jadeante, mientras movía sus caderas aún sobre el regazo de T/n, la cual estaba más que sorprendida y excitada— Quiero tocarte. Hacerte delirar hasta llegar al éxtasis, y que aún quieras más.

T/n: nunca antes en mi vida he sido la sumisa de alguien —Susurró rozando sus labios con los de su chica, la cual sonrió coquetamente.

Madelaine: para todo hay una primera vez —susurró la pelirroja, aún frotándose en la pierna de su novia. Petsch se acercó al oído de T/n— no te vas a escapar de mi. Prometo darte los mejores orgasmos de toda tu vida. . .

T/n soltó una leve risita, acompañado de un gemido agudo. Madelaine separó su rostro al de T/n, colocó sus manos en el cuello de ésta y la acercó a sus labios, los cuales mordió seductoramente.