023

2.7K 277 44
                                    

LUEGO DE ESA PEQUEÑA DISCUSIÓN acerca de a quien amaba más, Paty recibió una llamada y se fue a su habitación, Y hugo aprovecho y me llevo a la suya para prestarme ropa más cómoda.

-Ten, bonita-Habla ofreciéndome un buzo y una polera de su armario.

-Gracias amor-Murmuro tomando la ropa y yendo a su baño.

Una vez lista me mire al espejo, todo me quedaba exageradamente grande, pero me gustaba, olía a hugo y eso me parecía perfecto.

Cuando salí del baño, vi a hugo con una pijama normalita, estaba recostado en su cama y al escuchar mis pasos se voltee en mi dirección. Una carcajada salió de sus labios.

-Wow, te ves... aún más pequeña que de costumbre, amor-Iba a regañarlo pero cuando dijo amor me arrepentí.

Solté una carcajada sarcástica y fui a recostarme a su lado, me metí debajo de la sabana junto a él. Sentí su mano jalarme de la cintura y apegarme a su pecho.

-Quería decirte algo esta noche pero sentí que es muy apresurado y no quería abrumarte o que te sintieras obligado a decirme lo mismo-Solté dé repente contra su pecho.

-¿Que cosa?-Murmura acariciando mi cabello, y haciendo cariños en el.

-Yo...Hugo Arbues, creo que te amo-Balbucee avergonzada. Una pequeña risa retumbo en el pecho de mi novio.-¿Te estas riendo de mí?

Cuestioné separándome y mirándolo con el ceño fruncido.

Él deja de reír y me sonríe-Yo también te amo Neyra Peña.

Y esa pequeña frase hizo que mi corazón palpitara con rapidez, y un calor se instalo en mi pecho, ¿así se siente estar enamorada, cierto?

Puse mi mano en su mejilla y me acerqué a dejar un beso sobre sus labios, cada roce de estos con los míos me hacía sentir completa, me había vuelto adicta al sabor de su boca, y al calor de ella.

Nos separamos y me acomode en su pecho para dormir.

-Buenas noches, mi amor-Espeto Hugo.

-Buenas noches, tonto-Correspondí su gesto.

Y así, por primera vez en mucho tiempo, pude conciliar el sueño con facilidad, en los brazos del chico de era mi todo en ese momento.





















🌺💕

















A LA MAÑANA SIGUIENTE DESPERTÉ al sentir algo acariciar mi rostro, Lo primero que vi al abrir mis ojos fue a mi pelinegro.

-Buenos días-susurre y el me sonrió.

-Buenos días Ney-Contesta dejando un beso en mi nariz.

-Me encantaría despertar cada día así, contigo-Confesé abrazando su torso.

-Créeme que a mi también-Responde acariciando mi cabello.

-¿Que hora es?-Pregunto mirando hacía la ventana.

-Las nueve y me treinta y dos-Dice, respondiendo a mi pregunta.-¿Quieres que pasemos a desayunar y luego te dejo en tu casa?

-Me parece perfecto-Respondo poniéndome de pie.-Iré a preguntarle a tu hermana si me presta algo de ropa.

Y tras decir eso salgo de la habitación del pelinegro y me dirijo a la mi cuñada. Toco la puerta y escucho un "Pase"

-Buenos días Paty-La saludo y ella me sonríe.

-Hola cuñada, ¿Que necesitas?-Pregunta caminando hacía mi.

-¿Crees que puedas prestarme algo de ropa?-Cuestiono dudosa.

-¡Claro! Ven aquí-Exclama alegre, Camino en su dirección y observo como comienza a buscar algo para mi.

Finalmente me da un conjunto muy lindo, Le agradezco y me despido de ella, prometiéndole devolverle su ropa.

Me dirigí a la habitación de Hugo nuevamente, pero antes de entrar toca la puerta.

-Pase-Escucho a través de su puerta.

Al abrirla me encuentro a Hugo ya cambiado y con el cabello húmedo.

-Wow, que guapo ¿no?-Jugueteo con una sonrisa.

-Pues si, la verdad que si, soy muy guapo, que le vamos a hacer-Responde con arrogancia.

Suelto una risa y paso por su lado para meterme al baño.

Me doy la ducha más rápida de mi vida y me visto con la ropa que Patricia me presto. Una vez lista, tomo la pasta de dientes y la echo en el cepillo que hugo compro para mi hace un par de días.

Cuando finalmente termine salí del baño y me encontré con hugo en sentado en su cama y con su celular en mano.

-Estoy lista, ¿Nos vamos?-Cuestiono llamando su atención.

-Claro, vamos-Dice parándose de su colchón.

Bajamos los escalones hasta llegar a la primera planta, donde estaba la familia Arbues desayunando, Nos despedimos de ellos y salimos por la puerta principal.











𝐋𝐄𝐕𝐈𝐓𝐀𝐓𝐈𝐍𝐆, hugo arbuesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora