Capitulo 5. Mi primer día y compañera nueva

498 10 0
                                    

Estando ya en mi quinto sueño, como bien dice la expresión, escuche una melodía bastante molesta, diciéndome que ya era hora de tener que levantarme de la cama para poder ir a clase. Y así fue como me levante y me prepare para ir a la academia con una mochila en la que llevaba mis medias, mayas (etc.).  

Cuando llegue a la academia no pude evitar que en mi boca se formara una pequeña O de la impresión que me daba nada más que la estructura de de la puerta principal. Había un montón de chicos y chicas que salían y entraban de ese gran portón.  Chicos y chicas algunas de mi edad, otros más mayores  y otros que parecían que eran los profesores o padres.  

Mis dos primeras horas habían sido todo un desastre, ya que no conocía esa gran academia y casi toda la gente se chocaban conmigo, las cuatros siguientes clases fueron mejorando, porque pude conocer a mis maestros y a un chico llamado Alan que me dijo que estaba dispuesto a ayudarme con las siguientes clases.

Alan insistió en acompañarme a mi apartamento, me dijo que no me preocupara que él tenía que coger el mismo metro, aunque yo me imaginaba que no me decía toda la verdad.

Una vez en mi puerta, habiéndome despedido de mi nuevo amigo, me cogí mi móvil y me puse mi apasionante música clásica que tanto me relajaba, me desplome en mi sofá con mi música y empecé adormilarme viniéndome a la mente ese hombre de el avión, pero un el telefonillo de mi apartamento me despertó y recordé que podía ser el chico de la compra, y así fue.

Ya había colocado toso en su sitio, incluso las nuevas toallas y sabanas que había comprado. Y me acorde que tenía que llamar a mi nueva compañera de piso.  

-Eh, ¿hola?, Isabel ¿no?

-Sí, soy yo ¿Quién es?

-Hola soy Adriana, ayer me enviaste una solicitud para encontrar un piso compartido y me gustaría que vieras que te parece el mío.

-Claro, si quieres podemos vernos dentro de media hora para poder verlo, mi piso no queda muy lejos.

-Vale, aquí te espero. Adiós 

-Adiós Adriana.

Media hora después sobre las siete de la tarde mi telefonillo volvió a sonar y al abrir la puerta pude ver a la chica como de 19 años morena de piel, ojos grisáceos, pero negro con algunos reflejos en tonos caoba. Su altura era más o menos como la mía, a lo mejor un pelín más alta que yo. Delgada y con ropa que remarca bien su buena figura.

Le enseñe la que sería su habitación y por consiguiente toda la casa incluyendo mi habitación. Me dijo que le parecía una casa muy bonita y que si a mí me parece bien podría mudarse mañana mismo. Nos pusimos de acuerdo con los horarios. Congeniamos  bastante bien, me pareció una chica muy interesante, me conto que tiene un novio que llevan como un año, que ella es de Barcelona pero que se vino a estudiar aquí hace como dos años con otro novio que tuvo pero que siempre supieron que fue una relación destinado al fracaso que solo duro unos cuantos meses. Poco tiempo después conoció a Dan su actual novio y van muy bien.

Un año para recordarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora