Becoming {Larry Stylinson (Traducción)}

Capítulo Nueve: And the Woman Clothed with the Sun

Warning Alert.

Este capítulo puede tener momentos incómodos ya que se menciona de manera explícita violencia de carácter sexual hacia varios personajes secundarios.

Leer bajo su propio riesgo.

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La puerta se cierra detrás de Louis, sellándolo en la habitación. Es un sonido siniestro; demasiado ruidoso para su gusto.

Harry está de espaldas a la pared de vidrio de seguridad, sosteniendo algo en sus manos. Dispersos en el escritorio frente a él hay bocetos a lápiz de grafito, papel para escribir cartas en blanco y sobres, y una copia abierta del "Grand Dictionnaire of Cuisine" de Alexandre Dumas.

Harry se pone visiblemente rígido ante el sonido vacilante del acercamiento de Louis. Siente su labio superior curvarse hacia atrás de sus colmillos y, por un momento, siente un odio desagradable por el tímido Omega.

>>Te has debilitado, Louis. Eras tan fuerte antes<<

En voz alta, adopta un tono frío y burlón.

"Esa es la misma atroz aftershave que llevabas en la corte."

Coloca su boceto de Louis, como la Virgen María, sosteniendo a sus hijos, y se da la vuelta, preparándose. No obstante, no puede evitar que su pulso se acelere cuando vuelve a fijar los ojos en su ex-pareja.

Louis parece..., cansado. 

Su cabello está salpicado de gris, más que antes, iluminando sus sienes. Los cabellos plumosos son muy cortos, barridos hacia un lado y hacia abajo para cubrir la cicatriz en su frente. Su barba es más espesa que antes, no mucho, pero lo suficiente como para ensanchar su mandíbula, dándole una apariencia más áspera. Su cuerpo, oculto como está debajo de unos jeans oscuros, una camisa y un suéter de punto, permanece esbelto y tonificado, testimonio de cualquier trabajo duro que sin duda mantiene.

>>Exquisito<<, piensa Harry, aunque anhela volver a ver la oscura sombra del Omega. Puede sentirlo, reprimido, sofocado, hundido profundamente bajo un barniz de normalidad, y su propia bestia aúlla contra su injusticia.

Menciona la corte como una burla deliberada y, con no poca satisfacción, ve la púa. Los tormentosos ojos azules de Louis parpadean en dorado, los iris se llenan hasta que brillan como dos soles dentro de su pálido y perfecto rostro.

El juicio había sido largo y cruel, y Louis no se había librado de nada. Como ex compañero de Harry Styles, había sido pintado como una víctima indefensa de un Alfa sádico. Vinculado sin su consentimiento, manipulado para creer que era un asesino y luego manipulado para un asesinato real... Impregnado con semillas monstruosas y luego cortado, apuñalado y preso. Todos pensaban que no tenía los hijos de un caníbal trastornado que no piensa en nadie más que en sí mismo.

Era su secreto; de él, de su padre, de Harry y de Jack, que los gemelos estaban vivos. Que habían sobrevivido, a pesar del intento de Harry de interrumpir el embarazo.

Su papá se había quedado con los gemelos siempre que se necesitaba a Louis en Baltimore. Louis se había sentado con Jack en la sala del tribunal, los ojos ocultos detrás de los anteojos polarizados, la cabeza inclinada, los dedos tocando la piel alrededor de las uñas cada vez que se mencionaba su relación.

Había dado una declaración de hecho solo cuando el juez lo había ordenado, lo más sucinto que pudo salirse con la suya.

"- El Dr. Styles me unió y luego manipuló mis celos, haciéndome sufrir a través de la fase prodrómica prolongada, a pesar de conocer los riesgos para mi salud física y mental a largo plazo. Me hizo encarcelar en el Hospital Baltimore para Criminales Locos, acusado de crímenes que él mismo había cometido. Me animó a matar al Alfa, Randall Tier, y preparó una comida con carne que sabía que era humana.