Becoming {Larry Stylinson (Traducción)}

Capítulo Seis: Dolce

Cuando Louis ve a Harry entrar en su apartamento, herido como está, se sorprende de que el otro hombre haya llegado a casa.

"Jack Crawford está aquí" jadea Harry, y se desploma en una tumbona apenas dos pasos en la habitación. La sangre le empapó la camisa blanca y se ató un torniquete alrededor de la pierna con el cinturón para detener el flujo de su pantorrilla desgarrada. Su rostro es un desastre de hinchazón, hematomas y cortes, con una abolladura particularmente cruel en su mejilla, lo que sugiere una fractura en el hueso debajo.

"¿Lo mataste?" Louis pregunta, ocultando su consternación por las heridas y envolviendo un brazo alrededor de su Alfa para ayudarlo a entrar al baño "¿O mostraste misericordia?"

Harry se ríe y se sienta en el asiento de la ventana. Mientras Louis le prepara un baño caliente, se desnuda con manos doloridas y temblorosas.

"No tuve la oportunidad" confiesa, dejando caer la pila de ropa rota y manchada a un lado para quemarla "Él mostró misericordia."

Louis lo mira, sentado en el borde de la bañera, con la mano en el agua para probar la temperatura. Su expresión es ilegible; una mirada llena de emociones brillando bajo la superficie azul de sus ojos, y Harry siente una punzada de nostalgia.

>>Sé que realmente no estás aquí<< piensa, su compañera imaginada se vuelve borrosa para convertirse en la azabache Kendall >>Pero desearía que lo estuvieras<<

La ensoñación es preferible a la realidad, y Harry se entrega a la noción de ser cuidado por su Omega. Louis le presta un hombro en el que apoyarse mientras se sumerge en la bañera hirviendo, y se pasa los dedos por su cabello cubierto de sangre mientras la respiración de Harry lo traiciona con un tirón.

"Te tengo" murmura Louis, mojando los mechones antes de masajear con champú el cuero cabelludo tierno y desgarrado "Déjame limpiarte."

Harry asiente y lleva el dolor a los límites de su mente a través de un esfuerzo de respiración y meditación concentrada.

La sangre gotea en el baño, floreciendo en nubes rojas que empapan la esponja que Louis moja. Usa el agua manchada para enjuagar la cara de Harry, luego sus hombros, y se arrodilla junto a la bañera cuando llega a los brazos.

Harry permanece en silencio, con los ojos cerrados y la cabeza inclinada hacia atrás. Uno podría ser perdonado por pensar que está dormido, si no fuera por la agudeza de su olor mientras Louis trabaja, y el Omega huele su propia dulce excitación ante la demostración de dominio y control.

>>Incluso frente a la muerte, incluso en agonía, todavía estás a cargo. Sigues siendo un depredador<<

"¿Mataste al inspector Pazzi?" pregunta en voz baja, cogiendo el brazo de Harry e inclinándolo con la palma hacia arriba "¿Fue como lo planeaste?"

Harry abre un ojo y mira a lo largo de su muñeca. Las heridas de Matthew Brown brillan blancas contra el tono meloso de su bronceado y ve a Louis vacilar; huele la embriagadora mezcla de culpa y justa furia que siente su amado ante el recuerdo de intentar matarlo.

"Rinaldo Pazzi me vendió, sí" responde, y los dedos de Louis tiemblan alrededor de la esponja. Ambos saben lo que esto significa; Harry lo ha matado, un Omega. Es algo aborrecible para un Alfa, pero ¿fue un acto de sadismo o de defensa propia?

"¿A Mason Cabello?" Louis lo comprueba y Harry cierra los ojos con un zumbido de confirmación. No reconoce el aguijón del agua que cae en los numerosos cortes en su mano; no permite que su percepción de la realidad vacile cuando Louis frota ungüento en el peor de los cortes.