Becoming {Larry Stylinson (Traducción)}

Capítulo Cinco: Contorno

"En las noches tranquilas, cuando el aire estaba húmedo después de una lluvia, jugábamos."

La voz de Chiyoh, suave y cuidadosa, cuelga en el aire fresco del crepúsculo entre ellos y Louis se ve atraído por el anillo dorado alrededor de sus iris marrones, espeso y brillante en la creciente oscuridad.

"Harry quemaría todo tipo de especia e incienso" dice la joven Omega, recordando su infancia con el enigmático y peligroso Alfa "Para que yo lo identifique solo por el olor."

El tren a través de Europa los empuja a través de campos de ganado, parques eólicos y urbanizaciones y fábricas. Uno de los pocos trenes de vapor que quedan para hacer un viaje tan épico, consume más de treinta mil toneladas de carbón cada año y funciona todos los días excepto los domingos. Louis y Chiyoh se sientan en su propio carruaje, uno frente al otro frente a una ventana con cortinas mientras cae la noche en los campos de afuera.

Salieron de Minsk hace dos días y llegarán a Florencia mañana por la tarde. Louis ha enviado un mensaje a su papá, pidiéndole una foto de los gemelos, pero ahora no tendrá suficiente señal de celular hasta que lleguen a la estación para que busque una respuesta. El pensamiento hace que su pecho se sienta incómodo, pero no hay nada que pueda hacer al respecto, por lo que se obliga a concentrarse en el presente.

"Era encantador" agrega Chiyoh, su mirada distante mientras mira por la ventana "De la forma en que un cachorro es encantador..." una pequeña sonrisa fría, con los ojos brillantes "Un cachorro pequeño que crece como uno de los grandes felinos."

Louis imita la sonrisa, sus propios ojos destellan dorados.

"Uno con el que no puedes jugar más tarde."

Chiyoh asiente y se acomoda, retrocediendo hacia la sombra.

"El día que conocí a Harry" dice ella "Era un huérfano. Estaba destinado a encontrarlo con su hermana, pero él estaba solo."

Louis frunce el ceño, curioso.

"¿Cómo lo conociste?" pregunta, con el pecho apretado y el pulso acelerado ante la idea de un joven Harry; dañado, vulnerable y solo, enloquecido por los horrores de lo que una manada de Alfas le hicieron a él y a su hermana.

>>¿Por qué todavía me preocupo tanto por él? ¿Después de todo lo que me ha hecho?<<

"Yo era el asistente de su tía" responde Chiyoh, distrayéndose del dolor en la cara de Louis jugueteando con las cortinas de terciopelo en la ventana del tren "Es una vieja tradición en mi cultura, que los Omegas de cierta lugar aprendan de otros. Mis padres me enviaron a aprender de Lady Murasaki cuando era solo una niña" ella baja la mirada, algo agudo y sabio en su tono cuando agrega: "También aprendí de Harry."

"Viene disfrazado de mentor" acepta Louis, recordando su propia introducción al enigmático y tortuoso Alfa "Pero es la angustia lo que nos emociona."

Chiyoh lo fulmina con la mirada.

"No estoy angustiada" gruñe, y Louis sonríe secamente.

"Ya no" ante el sonrojo de Chiyoh, sus ojos dorados bajaron en sumisión, agrega suavemente "Tenías una regla estricta sobre quitar la vida. Y la rompiste."

>>Te hice romperla. Con apenas un empujón<<

Él frunce el ceño, curioso por su estado emocional. Se imagina que esto es lo que siente Harry; diversión leve y un deseo de saber, de entender a alguien más, incluso a su costa.

"¿Está en tu mente?" pregunta, mirándola atentamente, esperando que la serena máscara se deslice "¿Te ves matándolo una y otra vez?"

Chiyoh mira por la ventana, el anillo de oro en sus iris brilla y luego se desvanece en un cobre opaco.