Because i'm stupid (Pintor Nocturno)

Capítulo 2

—E...e... ¿Entrenador Seungho?

Sorprendido, Seungho se apartó de él. Apartó sus brazos y apretó las manos con fuerza.

—Nakyum... espera, yo... Agh— se frotó la frente. Claramente no sabía qué hacer ¿Qué se suponía que era lo más propio?

Joder... Maldita sea ¡Qué alguien lo asesinara!

¡Él acababa de coquetear con un estudiante! Con un integrante del equipo que el mismo entrenaba en la preparatoria que trabajaba.

¡Ahhhh! ¿Qué debía hacer? Tenía meses que no sentía curiosidad por nadie, no había coqueteado con algún tipo hacia mucho y hoy... justo el día en que decidió dejarse llevar con alguien que atrajo su atención... ¡Pasaba esto!

Llevaba una hora o más viendo la espalda de este chico, su cuerpo le atraía, la forma en que tenía acomodado el cabello y el olor del perfume que percibió de él cuando caminaron muy cerca fueron la combinación perfecta para cometer semejante estupidez.

— ¿Entrenador?— Ay rayos ¿Podía dejar de llamarlo así? Eso solo hacía crecer la roca de culpa y vergüenza que sostenía en su espalda en ese momento.

—¿Qué haces aquí? ¿No eres muy joven para estar en un lugar como este?

Claro, muy inteligente de su parte. Actuar con autoridad, tratar de aparentar que estaba tranquilo y abusar de su posición para desviar la atención del muchacho.

—Soy joven, pero no tan joven. Tengo ya los 18, puedo estar en este lugar sin problema.

—Es peligroso para un chico tan joven frecuentar lugares como este. Además eres un deportista, debes ser cuidadoso con tus horas de sueño y descanso.

—Pero...

—¿Cuánto alcohol has bebido? ¿Debería llevarte a casa? La ciudad no es muy segura de noche.

—¡No necesito un sermón sobre mi seguridad! ¿Qué diablos pasa con usted? Justo ahora suena como mis hermanas.

Nakyum hizo un extraño y llamativo gesto en el que inflaba las mejillas y cruzaba los brazos. Seungho sólo pudo pensar en la palabra "Adorable" y luego pasar a sacudir su cabeza.

Debía dejar de ver ese peinado, esa ropa y ese cuerpo.

Tenía enfrente a un estudiante, un preparatoriano ¡Joder! ¿Por qué seguía mirándolo?

—Disculpa, tengo una llamada— fingió. Fingió como un maldito cobarde porque tenía que dejar de mirarlo, de lo contrario terminaría con una erección entre las piernas.

¡Maldición! Ese chico se veía tan atractivo. Nunca antes le vio así en la escuela, era como si tuviese frente a él a un hombre que era totalmente su tipo.

Seungho era gay, hacia mucho que se convenció de sus preferencias, esto nunca le representó un problema, pero era algo que prefería mantener en secreto.

No era un libertino que iba de pareja en pareja, pero había tenido ya varios noviazgos en su historial, nada serio, pero muchas veces deseó encontrar el amor verdadero sintiéndose la mierda más cursi sobre la tierra.

Fingir una llamada para apaciguar sus deseos... vaya, que estrategia tan inteligente.

Una vez pudo tranquilizarse, giro su cuerpo para volver a donde Nakyum se encontraba y el asunto fue que... ya no estaba ahí.

Sábado 6:30 am

¡Maldita sea! Dos simples palabras que podía repetir en su mente al tiempo en que se removía en la cama con dolor de cabeza. ¿Cuánto durmió? Como una hora, que terrible para alguien como él que amaba dormir tener que estar en abstinencia de tal necesidad básica.