Durante el camino de regreso a casa, Lynda fue aguantando la furia y las lágrimas que amenazaban con salir. Las palabras de esa chica le hirieron de sobremanera, haciéndole sentir un gran pesar en su corazón. También, le demostraron muchas cosas, de las que ella no estaba enterada, o tal vez sí las sabía, pero se negaba a aceptarlas.
Apenas abrió la puerta del departamento, las emociones contenidas hicieron de las suyas y explotó en llanto. Se sentó en el sillón un momento, y dejó que las lágrimas salieran. Se permitió botar todo eso que le dolía, y a la vez, la tenía en un estado de total desconcierto.
Tratando de calmarse, se dirigió al baño para lavar su cara, quizás eso, le ayudaría a controlar aquello que se estaba manifestando en su interior.
Mirándose al espejo y como era habitual en ella, inició una conversación con la persona reflejada en él, la que, ahora, demostraba pesar, confusión, molestia y demás.
- Lynda ¿Qué sucede? Tratemos de aclarar las ideas- se dijo mientras pasaba las manos por su rostro-. Veamos ¿Por qué estás así? - soltó un suspiro-. Primero, tienes mucha rabia, el motivo es obvio. Esa chica te insultó, te trató de vieja y ridícula. Tienes toda la razón con sentirte molesta- dijo mirándose y mojándose el rostro.
"Segundo, sientes pena. Lo que también es obvio- se encogió de hombros-. Te dijo cosas desagradables y en forma completamente gratuita, ya que tú, a ella, no le hiciste absolutamente nada- se palmoteó el hombro a modo de consuelo- ¿Pero, estás triste sólo por eso? - guardó silencio un rato- O ¿Hay algo más que te está produciendo tanto dolor?"
Se quedó inmóvil, contemplándose sin expresión alguna. Volvió a lavar su cara, y logró calmarse. Pero, con el solo hecho de pensar la respuesta a esa pregunta, las lágrimas comenzaron a salir otra vez.
- Lo que más te dolió- se miró fijamente-, fue que te dijera que era obvio lo que sentías por Jung Kook ¿Cierto? - Las lágrimas aparecieron una vez más, y percibió como su pecho se apretaba.
- ¿Cuántas veces lo hemos conversado? - dijo apuntándose-. Mil veces lo hemos hablado. No te puede gustar Jung Kook ¡Eso es imposible! Eres 15 años mayor que él, lo viste nacer, lo viste crecer. Sabes a la perfección que para JK sólo eres su hermana, siempre lo has sido y siempre lo serás. - mojó otra vez su rostro.
"Pensé que ya lo habías superado, Lynda. Habíamos trabajado tanto para ver a Kookie sólo como un hermanito ¿Por qué nuevamente apareció este sentimiento? ¿Es porque JK decidió iniciar una nueva relación? ¿Estás celosa? - se increpó duramente- ¡Ya basta mujer! Vuelve a tus cabales. Eres su Noona ¡Nunca te olvides de eso!" -Dijo apoyando sus manos en el lavabo, mientras dejaba caer las lágrimas sobre este.
... Se quedó en esa posición un buen rato, hasta que se sintió más tranquila. Lavó una vez más su rostro y lo secó...
Totalmente compuesta, se digirió a la cocina y tomó una de las botellas de vino que tenía guardada. Puso música y comenzó a beber, intentando calmar el ardor, que aún, sentía en su garganta y en su corazón.
Se encontraba en eso, cuando escuchó su celular sonar, indicándole que estaba recibiendo una llamada. Lo tomo y vio que era de JK, lo que la sacó del estado de la tranquilidad que había logrado alcanzar.
Atendió en un total silencio, sólo se dedicaría a escuchar lo que su amigo tenía para decir. Al oír las primeras palabras, pudo notar el estado de ebriedad en el que se encontraba Jung Kook, por lo que decidió no molestarle y dejar que se explayase libremente. Sabía, a la perfección que, borracho, su amigo era mucho más honesto que cuando estaba sobrio, y meditaba diez veces las cosas antes de que salieran por su boca.
- ¡Noona, por favor perdóname! - partió diciendo con una voz poco legible-. De verdad no tengo idea qué pasó entre Young Mi y tú, pero imagino que nada bueno. De lo contrario, no te habrías ido, ¡Lamento haber arruinado tu noche! - dijo con un tono de voz cabizbajo-. Sé que no fui yo quien, literalmente lo hizo, pero ella es mi- hizo un silencio-, bueno, ya sabes. Y yo fui el culpable de haberla llevado a un lugar al que no debí. ¡Perdóname, por favor! - Hizo un extenso silencio.
- Noona, pídeme lo que quieras... Pero por favor, nunca más me vuelvas a pedir que me aleje de ti, eso hace que mi corazón destroce. - Su voz se quebró, tal cual lo hacía, antes de ponerse a llorar-. Tú sabes a la perfección lo que significas para mí- esta vez sí, su entonación demostraba que el chico estaba sollozando, lo que provocó mucha ternura en Lynda. Quiso tener la habilidad de atravesar el teléfono y abrasarlo unos cuantos segundos.
-Noona, en mi vida podrían faltar muchas cosas- dijo el chico entre lágrimas- pero lo que nunca soportaría perder, es a mi familia, mis amigos y a ti. Tú sabes cuán importante eres, y aunque no lo diga, yo... - se produjo un silencio y apreció algo parecido a una respiración.
Lynda sabía lo que había pasado. Tenía la habilidad de imaginar todo lo que hacía Jung Kook en ese momento. Pudo visualizar a JK apoyado sobre la mesa, con el celular cerca de su boca, y producto de las lágrimas, quedándose dormido en esa posición mientras le hablaba.
Era algo muy habitual en él, tomar el teléfono y dedicarle unas palabras a sus seres queridos, cuando se encontraba borracho -. Lo había visto un millón de veces.- Pero esta, era la primera, en la que el receptor de la llamada, era ella. Por lo general, esas iban destinadas a sus padres, su hermano o sus amigos. Ya que siempre que bebía, JK se ponía muy sentimental y le bajaban deseos de decirles a todos, lo importante que era en su vida. Y como la mayoría de las veces, ella estaba sentada junto a él, nunca había recibido una de esas.
Se sintió sumamente acongojada después de escucharle, porque con ese simple acto, le había hecho entender cuánto lo extrañaba, y lo mucho que deseaba retractarse de lo que le había solicitado. Quería llamarle de vuelta y decirle que se viniera a su casa, que deseaba estar con él, y que no se fuera más de su lado. Pero asumía, no lo haría, nunca tendría el valor para decirle eso a JK.
Las lágrimas, nuevamente, comenzaron a aparecer, porque, definitivamente, comprendía que sus sentimientos por Jung Kook no eran sólo de hermana mayor. Lo que sentía por él era amor, del que siente una mujer por un hombre. Lo sabía hace mucho, pero ilusamente, pensó que ya ese asunto, estaba superado. Pero se equivocó, ese amor seguía ahí, igual que siempre... Y dolía más que nunca.
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FunkyssesNunca he staneado a BTS, pero gracias a este Fic, estoy conociendo algunas de sus canciones... Y Still With You, me gustó muchito... ♡.♡
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LA EDAD ES SÓLO UN NÚMERO
FanficElla es 15 años mayor que él... Ella es latina y él un lindo coreano. Jung Kook, el chico casanova, que va de flor en flor, es su mejor amigo de toda la vida. Ella lo adora y siempre lo ha tratado como su bebecito. Para él, ella es su hermana mayo...