Capitulo 24 ⛈

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La vida es algo mas que ser un simple pasajero.

Cartas de amor a muertos

[...]

No pude decir nada por unos segundos.

–Es lo mejor para ambos– respondió el.

–¿P-Para ambos? Ayer estabamos bien ¿hice algo?– pregunté sintiendo mis ojos arder.

–No, no. Amh... tu no hiciste nada ¿de acuerdo?–.

¿Pero que habia cambiado? Todo seguia igual como siempre, ni siquiera demostró señales de querer alejarse.

–¿Me vendras con esa mierda de "No eres tu soy yo"?– dije, quiza un poco -muy- alto.

Vale tenia que calmarme.

–Esto no es asi– trato de calmarme.

–¿Por qué haces esto?– pregunté con mis ojos llenandose de lagrimas


Debemos hacerlo, tu y yo no...– comenzó.

–¿No que?– lo animé a seguir.

El apretó los labios y bajo la mirada antes de volver a hablar.

–No tenemos un futuro juntos. No serviremos como pareja ¿okey? Tu no eres para mi y yo no soy para ti...–.

Las palabras pasarón una por una en mi cabeza.

–Nada de esto fue real– completó el

–¿No lo fue?– indagué limpiando mi cara con mis manos.

El negó con la cabeza todavia sin mirarme.

–Te entregué todo de mi, cada maldito lugar de mi corazón. Me hiciste sentir que por fin era suficiente para alguien, animabas mis dias tristes y ahora resulta que esto– nos señalé– ¿que esto no es real?–.

Por un momento ninguno de los dos dijo nada.

–Yo... lo siento pero desde el principio supe que nada de esto duraria. Tu tienes tus metas y yo tengo las mias– dijo con simpleza.

Mierda... sus palabras ardian.

–Pues espero que encuentres a alguien mas– dije dando un paso hacia atras–, alguien que te quiera–.

–Hera....–

No espere a que dijera algo mas, limpie mis lagrimas y me di la vuelta para comenzar a caminar por donde llegué.

Realmente crei que esto iba en serio, lo esperaba de todos, pero... ¿De el? De el no lo creeria jamas. Los mejores momentos de mi vida fueron con el, mis mejores risas eran por el, mi sonrisa mas sincera fue de el. Le di todo, confie en el.

No queria llegar a casa, no asi. Desvié mi camino hacia otro lugar que conocia perfectamente.

Cuando llegué aún con el corazón acelerado toqué la puerta. No tardarón en abrir.

–¡Hera! ¿Que haces aqui? Hace mucho tiempo no...– comenzó a hablar mi Tia Vero.

No la deje terminar, me abalanzé sobre ella para abrazarla fuertemente, ella lo entendió rapido y me lo regresó.

Comenzé a llorar en su hombro.

–Vayamos adentro bonita... vamos a hablar– dijo empujadome un poco para entrar a su casa.

"Contigo" ~ ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora