(Capítulo 6)

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Primero que nada, disculpen por este extremadamente corto capítulo, ni siquiera sé si en verdad llamarlo capitulo, pero bueno, es lo que puedo hacer con el tiempo libre que tengo.

Espero sea de su agrado y que estén presentes para el siguiente capítulo, una vez más, disculpen.

Comienza el Capítulo.

Kurotsuchi divisaba desde lo alto del balcón de su torre kage como una legión regresaba desgastada por el combate, los cuernos no se hicieron esperar y resonaron por toda la aldea anunciando su regreso.

Como ella ya esperaba, un ninja apareció a sus espaldas arrodillándose antes de comunicar — Tsuchikage, la cuarta legión a vuelto y no con muy buenas noticias.

  — ¿Cuántas bajas?  — Interrogo Kurotsuchi ya sabiendo el resultado del combate.

 — Eso esta por determinarse, Tsuchikage...pero por lo que puedo escuchar de algunos camaradas es que han dejado muy mal heridos a los ninjas de Konoha, y que en estos instantes tal vez seria correcto lanzar otro ataque tras la debilitación de su defensa en la frontera norte.

Kurotsuchi suspira antes de decir —Muchas gracias, capitán...puede retirarse.

 El ninja se retiro dejando una vez más a solas a la Tsuchikage quien aparentemente seguía viendo la ciudad, pero en realidad tenía la vista nublada y perdida mientras que cientos de emociones la golpeaban una y otra vez. 

Regreso a su oficina cabizbaja y muy pensativa, al estar perdida en sus pensamientos no pudo darse cuenta de que todo su despacho se había llenado de consejeros, ninjas y lideres de clan entre otros.

— Tsuchikage...¿Entendió lo que acabamos de decir? — Interrogó un consejero.

Al ser nombrada Kurotsuchi parpadeo repetidamente despertando de su trance — Lo siento, por favor repita la cuestión.

Por un momento todos miraron confundidos a la Tsuchikage, al parecer no había escuchado nada de lo que hablaban.

— Hablábamos de la oportunidad que ahora tenemos, los informes dicen que la frontera norte está debilitada y que sería preciso lanzar otro ataque para tomar dicha posición, y que lo usemos como guarnición para el abastecimiento de las tropas — Formuló el Consejero Principal.

— Entiendo... — Asintió Kurotsuchi dolorosa por dentro.

— El Daymio a dado órdenes estrictas, debemos entrar al "País del Fuego" y terminar con esta barbarie...

— ¿Y el Daymio como supone que logremos eso? — Interrogó la Tsuchikage irritada.

— Cómo bien sabe, durante una guerra los Kages nunca intervienen directamente, o al menos no desde los tiempos del Primer y Segundo Hokage — Comento el Consejero.

— ¿A que quiere llegar? ¿Qué quiere el Daymio que hagamos, Consejero?

— El Feudal sugirió que le demos uso a las ya viejas reglas de guerra...específicamente en una clausula, la cual dice..."Ninguna Sombra podrá tener presencia física durante un conflicto armado, evitando así un innecesario y dañino combate de grandes proporciones"

Kurotsuchi suspiro — Si, todos sabemos que dichas clausulas en realidad se crearon para evitar que el Primer o cualquier Hokage participara en batalla por el daño que causaban... ¿pero eso en que nos ayudaría?

— Otra clausula especifica que..."Si una Sombra se hace presente durante dichos conflictos, el resto tendrá la opción de participar abiertamente y sin mesura alguna"... ¿Lo comprende? El Daymio ha ordenado que aparezca en batalla obligando a que el Hokage también se presente, y que una vez ahí... lo extermine.

En su interior, Kurotsuchi se rompía y explotaba de tristeza, miedo y furia, lo que hasta hace poco tiempo temía como la peor situación entre Naruto y ella se estaba por llevar a cabo.

Corte de Escena

El día acabo cómo ahora comúnmente terminaban, siempre grises y cargados de una gran pena que la guerra iba dejando a su paso. Mientras Kurotsuchi regresaba a casa fue una tortura escuchar por toda la ciudad los llantos incesantes de las esposas, padres e hijos  quienes habían perdido a alguien en la reciente batalla.

Recordó las palabras que una vez le había dicho su padre y que también había compartido con Naruto — Es mejor un mal arreglo, que un mal conflicto.

El andar de Kurotsuchi aumento de velocidad hasta que terminó corriendo a toda velocidad hacia su casa, llegó y desesperadamente abrió sus puertas para ocultarse y bajar su máscara que tanto le costaba mantener. Corrió a su habitación y cerrando fuertemente la puerta tras de si se tiró a la cama a llorar desconsolada.

Cada lágrima parecía ser un recuerdo que ahora le pesaba terriblemente. Rememoraba cada momento que ella había pasado junto a Naruto, cada cita, paseo y baile que aún que hubiera sido a escondidas fue maravilloso para ambos.

Kurotsuchi en estos momentos solo deseaba tenerlo junto a ella, besarlo, amarlo y sentirlo sobre ella. Inconsciente, comenzó a hablar como si él se encontrará frente a ella.

— Naruto...Naruto...¿Por qué nos pasa esto?...no quiero herirte, t-te necesito, no puedo estar sin ti...Te amo.

Fin del Capítulo.

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