Relatos del Bibliotecario

El Camino: parte 1

El día estaba tranquilo y el valle brillaba en un rojo rubí mientras las hojas eran mecidas plácidamente por el viento. En la cima de un pequeño monte una figura observaba tendida en el pasto.

Tenía un ojo cerrado mientras que con su ojo derecho un símbolo azul brillante de una cruz encerrada en un círculo la ayudaba a observar el valle a la distancia. Los detalles nítidos eran borrosos a la velocidad que miraba buscando entre los arbustos dorados y los arboles de corteza blanca y hojas rojas.

Se había captado una anomalía temporal en la sede centrar.

-maldición-dijo mordiéndose una uña. Muy mala había sido su suerte que en plena capacitación de infiltración allá sido encomendada a tal pequeña tarea. Solo su suerte.

Suspiro mientras se recostó en una roca. Había un panorama extremadamente tétrico en este sitio. El sonido de las aves y vestías divinas se habían acallado y una extraña paz reinaba en este lugar. Esto tenía un aire de entidad oscura demasiado remarcado, puede ser que ella no estuviera lo suficientemente capacitada para esta tarea.

Sus orejas de conejo se movían con nerviosismo mientras la pequeña figura tenía sus dos manos en las fundas de sus revolver mágnum. Las armas estaban hechas de un material parecido al acero enchapado en bronce con varios tubos de cobre que salían de un núcleo y en la parte de la culata una marca de un paquete de zanahoria. La chica conejo vestía un traje café de exploradora decorado con varios símbolos de bronce en forma de relojes de arena. En su hombro izquierdo un escudo con manecillas del reloj y en centro de su traje un engranaje de cobre. Atado al cinturón de su short había varios bolsos pequeños. Ella deslizo su mano por una de estas y saco un objeto plano con un patrón y presiono e botón.

-aquí señora del tiempo, llamando al comando central -ella espero una respuesta pero lo único que obtuvo fue estática-aquí señora del tiempo código #234 requiere un reingreso de emergencia- sus instintos empezaron alertarse de una manera anormal.

El sonido de la estática pareció aumentar.

Sus ojos se agrandaron mientras el sudor corría por su rostro-reingresare a la corriente del tiempo en 3...2...1...0- ella aún estaba en reino divino-no-susurro.

La estática empezó a desaparecer.

Te.... encontré....

Sus piernas se tensaron y de un salto se arrojó del monte hacia abajo. La tierra se rompió una garra emergió de esta. La mano bestial protegida por la quitina brillo en el cielo. Mientras caían los ojos cafés de la chica se habría en revelación.

Una horrible verdad recorría su columna como el frió.

Sus piernas se tensaron en el aire y de un impacto apresuro su caída al suelo.

Giro posicionando sus piernas en el suelo y cayo. Flexionando sus rodillas que en ese instante se tensaron, las venas se remarcaron en su piel y de un salto empezó a correr.

Su cuerpo era un borrón en los árboles. Apenas se veía mientras su corazón palpitaba desesperadamente. Se detuvo por un instante mientras una enorme boca negra como el abismo más profundo la esperaba abierta con sus dientes filosos. Ella rápidamente se apartó hacia la derecha y siguió corriendo.

Entre los arboles un borrón corría más rápido que el sonido más rápido que la luz. El tiempo mismo de doblaba bajo su voluntad.

¡Esto sobrepasaba su rango y habilidades! La chica conejo se dijo así misma mientras corría desesperadamente y las lágrimas se formaban en sus ojos.

Sus piernas se tensaron y dio un salto mientras la tierra se rompía y un ojo gigante color rojo la observo desde el abismo.

¡A modificado la realidad! ella estaba atrapada en una burbuja a merced de esta vestía de la creación.