Prologo

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Es mi primera vez escribiendo espero lo disfruten...😊

Izuku se despertó con la respiración agitada. El dolor profundo en su pecho había regresado, pero algo diferente al que había experimentado durante los primeros días luego de roto el vinculo. ¿Cuánto había pasado ya? ¿Dos años?. Se sentó en su cama y suspiro profundamente, se miro a si mismo, su cuerpo estaba sudado y su respiración entre cortada, como si acabara de regresar de correr un maratón. Cerro sus ojos con fuerza, llevando su cabeza hacia atrás, y se maldijo a si mismo.

- ¿Por cuanto tiempo mas voy a hacer esto? se dijo y se deslizo fuera de la cama. 

Eran las dos de la madrugada, camino por el pasillo oscuro de su departamento hasta llegar a esa habitación que no había sido abierta en meses. Al llegar apoyo su frente sobre la puerta cerrada, luego coloco su mano sobre el picaporte. Así se quedo por lo que parecieron horas, tomo una ultima bocanada de aire, e ingreso al dormitorio.

Todo allí seguía igual, como si el tiempo nunca hubiera pasado, observo los muebles de color blanco que se encontraban dispersos en la habitación, los que tenían una fina capa de polvo por el desuso. Se acerco hasta la cómoda y miro los retitos que que allí descansaban. Tomo el primero que estuvo a su alcance, observo minuciosamente la escena plasmada, como si de un extraño se tratara.

Se miro a si mismo sin reconocerse, poco quedaba de ese joven de sonrisa brillante. La fotografía lo mostraba unos años mas joven, su cabello de color verde, al igual que sus ojos, se encontraba mucho mas largo que ahora, haciendo resaltar las pecas de sus mejillas.

Detrás de él abrazándolo por la espalda, con el mentón apoyado sobre su hombro se encontraba un hombre unas cuantas cabezas mas alto que él. Ambos compartían una enorme sonrisa y brillo es sus ojos ¿así es como se ven las personas enamoradas?

El dolor volvió a cruzar su pecho y una lagrima rodo por su mejilla. Dejo el retrato en su lugar y giro sobre si mismo. Ante el se encontraba una cama matrimonial, con los restos de lo que había sido su nido. Un montón de mantas, almohadas y algunas prendas. A pesar de haber hecho todo su esfuerzo, con el paso del tiempo su nido iba perdiendo su forma, y por mas que intentaba arreglarlo ya no era el mismo.

Suavemente e intentando no mover nada de su lugar se introdujo en el nido y hundió su cara en las almohadas. Ese lugar que en el pasado había sido tan cálido, suave y reconfortante a tal grado de poder pasar horas e incluso días en el, ahora solo le transmitía frio y desolación. Instintivamente su nariz busco el olor que lo había hecho tan feliz. Abrazo las mantas e inhalo con fuerza, sus fosas nasales se llenaron de olor a polvo. Era definitivo, nada quedaba ya del olor de su pareja.

Abrazo con mas fuerzas las mantas y lloro sonoramente, su lobo interno no estaba mucho mejor que él, lo escuchaba sollozar aullando, intentando llamar a su compañero, pero su llamado nunca iba a ser contestado... 


Bueno es la primera vez que escribo. Había publicado esta historia con otro nombre y personajes, pero me pareció muy forzado. Una vez que cambien los personajes todo empezó a fluir mucho mas fácil.

Espero sus comentarios 🙌

Bajo una lluvia de pétalosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora