CAPITULO 23

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Cuando el cerebro de Betty pareció asimilar las palabras de él comenzó a llorar convulsivamente y esto preocupo a Armando así, que se estaciono en la orilla de la calle y solo fue capaz de abrazarla y acariciarle el cabello, hasta que se tranquilizara

A: Mi amor ¿Qué pasa? ¿Porque te pones así? yo no dejare que nada te pase

Betty solo sabía llorar, no le salían las palabras pero, cuando al fin pudo decir algo solo salieron de ellas cuatro palabras

B: Que pena con ellos
A: Mi amor tranquila que no me gusta verte llorar
B: ¿Como no lo voy a hacer? ¿Te das cuenta lo que pensaran ellos ahora de mí? Creerán que me quiero quedar con la empresa
A: No tienes que preocuparte por nada yo ya hable con ellos y me dijeron que podía contar con ellos
B: Si, pero pensaran que yo me quiero robar la empresa y eso no es así (sollozando)
A: No piensan eso además yo les conté todos los planes que tenemos para poder recuperarnos cuanto antes
B: Eso no importa igual lo van a pensar y cuando se entere Doña Marcela aun peor el Doctor Valencia ellos sí que me van a querer ver en la cárcel hip, hip
A: Yo no lo voy a permitir ellos no van a hacerte nada puedes estar tranquila, pero deja de llorar por favor que se me parte el alma verte así

Armando la abrazo muy fuerte contra su pecho y le acariciaba suavecito el cabello y la espalda, esas caricias parecieron tranquilizarla, pero los hipidos no cesaron

A: Cielo tú tranquila que si esto se llega a saber yo asumo toda la responsabilidad ¿Bueno? Yo jamás permitiría que algo te pasara
B: Pero, ellos van a tomar represalias sabes que me detestan y ellos serian muy felices con vernos allí a ti y a mí
A: De verdad estate tranquila cielo, yo no lo voy a permitir y ahora sécate esos ojitos que no me gusta verte así

Suavemente le fue secando los ojos con un pañuelo y cuando termino se dedico a besarla para demostrarle a través de sus besos que él jamás permitiría que algo malo le pasara

A: Te amo no lo olvides y siempre, siempre te protegeré de todo y de todos
B: Yo también te amo y jamás amare a nadie que no seas tú

Se siguieron besando por un par de minutos hasta que se dieron cuenta que estaban dentro del carro, así que no quedándole de otra se fue a dejarla a su casa, claro no sin antes tener otra sección de besos y caricias

Cuando Betty entro se encontró con unas maletas en la entrada, se sorprendió pero, nada dijo ya se enteraría

B: Papá, mamá llegue (levantando un poco la voz)
DJ: Hay mamita que bien porque ya su padre andaba rezongando
B: ¿Y esas maletas mamá?
DJ: Ah lo que pasa que mañana salimos para Ibagué porque su tía Aurora está agonizando
B: ¿Se van en el carro?
DJ: Pues sí ya sabe que su papá no le gusta viajar en bus
B: ¿Y por cuantos días estarán por allá?
DJ: Pues yo creo que una semana mínimo
B: Pues los voy a extrañar mucho, ah deje que le anote el número de la empresa para que me llamen cuando lleguen, bueno
DJ: Bueno mamita

Esa noche Betty recibió mil y un recomendaciones, Don Hermes no estaba muy seguro de dejarla ahí, pero no podía ausentarse del trabajo así, que no quedándole de otra dejo a su niña sola en Bogotá.

Cuando amaneció los tres estaban levantados, Don Hermes y Doña Julia preparando el carro para el viaje y Betty lista para irse a la oficina

DJ: Bueno mi niña nos estamos hablando apenas cuando lleguemos
B: ¿Guardo el número?
DJ: Si mamita aquí lo llevo anotado
B: Bueno cuídense, los amo mucho a los dos
DJ: Yo igual mi niña, usted cuídese y cualquier cosa ya sabe va donde la mamá de Niquito
B: Si no se preocupe, buen viaje papá cuídense mucho y no lo olviden me llaman apenas lleguen
DH: Si mija y cuídese usted también no olvide que el diablo es puerco y no me gusta para nada la idea de dejarla sola aquí

OLVIDAR TU ENGAÑODonde viven las historias. Descúbrelo ahora