❍ℋ𝙸𝙹𝙾𝚂 𝙳𝙴 ℒ𝚄𝙽𝙰❍ 𝙺𝚅

🌱𝑺𝒆𝒊𝒔

⊱✧⊰

Ya habían pasado tres semanas, convivían felices y tranquilos, claro con algunas complicaciones entre TaeHyung y JungKook, pero todo era armonioso.

SeokJin intentaba hablar y decirle a los chicos el por que de la ausencia de el décimo chico, mas no encontraba el momento indicado para tal noticia.

—¡¡Oppa!!, ¡¡Oppa, NamJoon!!.

—¿Qué ocurre Hye-Jin?

—Ya es de madrugada y JungKook aun no llega.

TaeHyung volteó a ver hacia aquellos chicos y frunció el ceño. ¿Qué acaso JungKook no se había ido a dormir hace dos horas?.

Dejo su libro a un lado y camino hacia las escaleras, al ya estar en la puerta de la habitación de JungKook, tocó varias veces sin obtener respuesta alguna, abrió la puerta y prendió las luces, JungKook no estaba, ni en la cama o en el baño. ¿A dónde había ido?.

Camino a su habitación y tomó saco un abrigo que puso en su cama para atender la llamada entrante en su celular.

JungKook
—¿Estas dormido?... que pendejo claramente no... me contestaste.

—¿Estas borracho Jeon?

—¿Borracho?, Jajaja por supuesto que no .

—¿En donde estas?, ¿Ya vienes?... me tienes preocupado.

—En la calle... creo que ya estoy cerca de la casa. Espera... ¿preocupado?........

La llamada se corto y TaeHyung miro preocupado por la ventana y vio la llovizna que estaba afuera y en esos momentos no estaba en condiciones para usar sus poderes puesto que últimamente cuando intentaba utilizar uno de los dos más habituales hacia todo lo contrario, detestaba el no poder ser normal.

—¡Ya nos iremos a dormir Tae!—Gritaron desde afuera y después abrieron su puerta—¿Esperas tu a JungKook?

TaeHyung asintió y tomó su abrigo para después bajar a la sala. Y apagar la mayoría de las luces exceptuando la de la entrada. 

Cerró sus ojos y de la nada su característica aura Lila apareció y sus ojos se iluminaron en rojo y el otro Lila para después la lluvia pararse y convertirse en una lluvia de estrellas que daban a entender su estado en ese momento se sentía confundido y con una lluvia de estrellas en su estómago cada que escuchaba o hablaba con JungKook.

JungKook desde ese farol a unos siete metros de la casa observó como la lluvia paraba abruptamente y de la nada una preciosa lluvia de estrellas llenaba el cielo.  Sonrío sabiendo que eso era producto de su Peligris/castaño.

Llego a la puerta y toco siendo recibido por un TaeHyung en Shorts negros y una camiseta blanca grande que dejaba al descubierto uno de sus hombros.

Lo analizó algunos minutos hasta que sintió como el de ojos heterocromicos se lanzaba a él y lo abrazaba.

Sorpresa.

Eso es lo que el pelinegro sintió.

—No vuelvas a salir tan noche, no sabes que te puede pasar.