Zoom y algo más.

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Hande:

Cierro la puerta con frustración después de una de mis tantas discusiones con Murat en el tiempo que llevamos de cuarentena, en esta ocasión debido al hecho de que hubiese aceptado mi nuevo proyecto, algo a lo que él se había negado por completo.
La cuestión es que lo hacía por motivos egoístas, como el hecho de que una serie en televisión llevaría más horas diarias en el set, lo que significa que no podría pasar tiempo con él, ir a alguno de sus conciertos o cualquier cosa similar. Como si a mí a estas alturas de la vida me hiciese falta ir a algún concierto para terminar de odiar su voz.

Con bastante poco ánimo respondo a la llamada por Zoom de mi co-protagonista, Kerem Bürsin, que me saluda con una sonrisa inmensa que provoca una sensación de ligereza en mi estómago. Y cuando comienza a hablar sin descanso, todas las preocupaciones que podían haber en mi cabeza desaparecen por completo, así que no me sorprende estar riendo a carcajadas cuando lo escucho criticar la personalidad de Serkan Bolat.

- Todos sabemos que aunque ahora lo odias, terminarás enamorado de él- digo en mitad de una carcajada, verlo poner esas caras es algo para lo que no me había preparado- Todo el mundo caerá a sus pies.
- ¿Estando Eda Yildiz? No lo creo, serían tontos si no cayesen a los pies de un personaje con tanta fuerza- ahora está más serio, y sus ojos brillan con suavidad- El mundo entero va a caer rendido a tus pies, Hande Erçel.

No entiendo el motivo, pero sus palabras son cálidas, amables, poderosas. Son aquellas que compensan todo lo malo que puede suceder durante el día, palabras que jamás había escuchado de los labios de otras personas que no fuesen de mi familia o amigos.
Jamás de mi pareja.
Así que no puedo responder porque el sonrojo cubre mi cara sin pedir permiso para aparecer, y tengo que apartar la mirada de la intensidad de la suya. Aún tras todo esto, no puedo retirar esa pequeña sonrisa de mis labios cuando lo escucho carraspear, quizás un tanto incómodo al sentir que ha sobrepasado alguna especie de límite.

- Gracias- susurro- No es que esté tan acostumbrada como piensas a recibir este tipo de halagos de la gente que me rodea, al menos no en el momento en el que los necesito.
- ¿Y hoy son necesarios?- vuelvo a mirarlo, sigue con la misma mirada que me dice que podría descubrir mis más profundos secretos sin tan siquiera proponérselo-
- Cada día lo son- susurro, hipnotizada-
- Entonces te recodaré cada día lo maravillosa que eres- y sonrío, porque le creo, porque sé que lo hará-

Kerem:

La mejor parte del día es cuando Hande aparece en la pantalla de mi ordenador, y por algún extraño motivo, hoy había olvidado por completo mi reunión con ella al estar en un directo. Para colmo, se había atrevido a ir a dejarme en evidencia, así que por miedo a que no quisiese volver a hacer la videollamada, comencé a halagarla de la forma en que le había prometido, solo que públicamente.
Ahora que el directo había terminado, lo primero que hice fue marcar su número.

- Lo siento mucho, mucho, mucho- comienzo a decir a toda prisa- De verdad, no lo olvidé, solo que se me pasó el tempo volando y…
- No importa, de verdad, no te preocupes- la escucho decir, pero su voz suena más apagada que de costumbre-
- ¿Estás enfadada conmigo?- se hace un silencio al otro lado- Hande, por favor, no te enfades conmigo- susurro, suplicando-
- No estoy enfadada contigo, no podría ni aunque quisiera- vuelve a tener ese tono lleno de pesar- Solo… los días están siendo complicados.
- ¿No llevas bien la cuarentena?- ahora me pongo más serio, he aprendido a reconocer su tono de voz, y hoy parecía uno de esos días en los que tendría que arrancarle las palabras-
- No llevo bien la compañía de mi cuarentena- un suspiro sale de mis labios ante la confesión de mi compañera, y miles de escenarios pasan por mi cabeza, a cada cual peor-
- Si necesitas cualquier cosa, no me importa la cuarentena, te prometo que voy directo a tu casa y…- no sé porqué estaba hablando de una manera tan protectora-
- ¿Y qué?- noté la sonrisa en su voz- ¿Qué harás después, Kerem Bürsin? ¿Me rescatarás?- sí, se está burlando de mí-
- No necesitas que nadie te rescate, pero sí que puedo comenzar a gritar todas las cualidades que te hacen ser una persona excepcional si eso consigue que otras personas puedan verlo.

HanKer One ShotDonde viven las historias. Descúbrelo ahora