Capítulo 4

183 12 3
                                    


Por fin viernes, la verdad es que esta semana no había pasado nada, lo de siempre, fingir estar bien por las mañanas, estudiar por las tardes y romper a llorar y gritar contra la almohada por las noches, recordando lo sola que estoy en la vida y añorando cada minuto que pasa a mi padre.

Sábado por la mañana, me preparé ya que había quedado con Hugo a las 12:00, le pregunté a mi madre si me podía acercar a su casa, al principio se sorprendió, porque no solía quedar con nadie, luego la expliqué que era porque tenía que hacer un trabajo y la sonrisa se le borró de la cara, aunque de todas formas se notaba que estaba feliz porque me relacionase con otras personas de mi edad.

La verdad es que no vivíamos muy lejos, a unos 10 minutos en coche, para la próxima podría ir andando.

Llegué 5 minutos antes de lo acordado, llamé al timbre y me recibió con una adorable sonrisa, despedí a mi madre con la mano y esperé a que se alejara un poco el coche para entrar, la casa por fuera era normal, bastante grande pero no llamaba la atención, entré, tenia una decoración algo rústica, pero con algunos toques modernos, la única pega era que, al pasar dentro me dio un fuerte olor a alcohol y tabaco...
No me gustaba nada ese aroma, era rancio y apestoso.

-Siento el olor... desde que mi madre murió de cáncer hace 2 años mi padre se ha vuelto un puto alcohólico, que no hace otra cosa que destruirse por dentro con esos malditos cigarrillos, y según se ve, este olor ya no se irá nunca de esta casa.
-Lo siento.. mi padre murió hace 4 años también.
-Oh, lo siento.
Una mueca apareció en mi cara sin quererlo.
-Bueno, ¿empezamos ya? -Dije para liberar tensione.
-Sí.

Crying in the dark.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora