Sirena ( Klaus M) [ EN EDICIÓN ]

17

"OH, ESE CULO DE RATA."

Lilura tomó un sorbo de su té de manzanilla, los ojos azules siguieron cada movimiento de Klaus.

"Continúa", dijo.

"Desahogate."

"Quiero retorcerle el cuello", enfureció.

"Quiero arrancarle el corazón y destruirlo con un martillo".

Lilura apenas fue escalonada, "Tengo uno en la cocina, si quieres".

"Quiero que sufra como nunca antes".

"Eso es encantador", sonrió Lilura.

"¡Sirius! ¡Ven con mamá!"

Sirius saltó a su regazo obedientemente, mordisqueando una golosina que Lilura había pegado en la hendidura del sofá.

"Cariño y ... idiota", dijo Klaus, "Pongamos este programa en marcha".

Sirius le envió una mirada algo disgustada a Lilura.

"Sí, lo sé", respondió ella.

"Pero normalmente me dejo llevar por la corriente".

--∆--

"¿Puedo vomitar?"

"La basura está allí", respondió Klaus, señalando los contenedores frente al Mystic Grill.

"Trata de no derramar. Te compré ese vestido."

Lilura se rió entre dientes, "Entonces vomitaré en tus zapatos, diablos."

Mientras se acercaban, Lilura realmente sintió la necesidad de vomitar porque Damon y Elena se miraban el uno al otro con esas miradas de dolor de amor oh, amor prohibido.

"Ah, ah- no estoy diciendo que tengas una apariencia atractiva. Estoy diciendo que esta es la que menos te gusta ...", dijo Elena, con los ojos iluminados por la alegría.

Damon sonrió, "anotado ves si puedo hacer alguna mejora".

"No se preocupen por nosotros", dijo Klaus, efectivamente sorprendiendo a los dos.

Lilura tosió en voz alta, deseando que la imagen de un Damon y Elena coqueteando se fuera de su cabeza.

"Klaus," respiró Elena.

"¿Vas a hacer esto en el Grill? ¿Delante de todos? Está un poco por debajo de ti, ¿no crees?" Damon se burló.

"No sé de qué estás hablando. Solo vine a mi club local para tomar una copa con mi chica y mi pareja".

"Es más un mayordomo que un amigo", dijo Lilura.

"Dale una ronda, ¿quieres Tony?"

Tony les entregó todos los vasos.