(Narra: Nate)
Hoy tenía que ir caminando a la escuela, mamá no podía llevarme porque la citaron con urgencia del trabajo, por suerte el colegio me quedaba relativamente cerca de casa.
De camino fui dándole una última ojeada a la tarea que la señora Smith había dejado y acomodando los papeles de las evaluaciones que ella misma me había pedido calificar.
Una de esas evaluaciones era de Katya, precisamente el grupo que la profesora me dio a revisar era el suyo, me sorprendió lo bien que argumentó sus respuestas, Ania ha tenido una buena influencia en ella.
Iba tan inmerso en mis pensamientos que no me percaté del individuo que se me acercaba.
- ¡Joder! - exclamé en el suelo.
- ¿¡Que acaso no ves por donde vas!? - gritó el joven frente a mí, también en el suelo, buscando algo que al parecer cayó con el impacto.
- Podría preguntarte lo mismo, ¿no crees? - le miré desafiante.
- Perdona, tienes razón, fue culpa de ambos, supongo - razonó mientras tomaba su celular, que aparentemente no sufrió daños con la caída, se levantó y me extendió su mano para ayudarme.
- Gracias, y no te preocupes, como acabas de decir: fue culpa de los dos - respondí arreglando mi mochila, algunas cosas se salieron de su sitio.
- Este... ando un poco perdido, ¿sabrías indicarme el camino al Colegio Nacional? - alcancé a ver la aplicación de Google Maps abierta en su móvil, la posible razón por la que no me vio en su camino.
- Pues estás de suerte, casualmente es el colegio donde estudio - mencioné.
- ¡Vaya sorpresa! Entonces... ¿podría ir contigo?
- Claro, vamos - respondí haciendo que me siguiera.
- Muchas gracias por la ayuda - su expresión se tornó aliviada.
- De nada - respondí - Por cierto, ¿cómo te llamas?
- Lucas Brown, ¿y tú?
- Nate Jefferson, un gusto.
...
El camino se hizo corto. El chico me contó que llevaba poco tiempo en esta ciudad, un par de meses exactamente, de ahí el hecho de que no conociera ciertas direcciones y entrara tarde al curso interrumpido por la pandemia.
- Nuevamente, muchas gracias por la ayuda - mencionó.
- No fue nada - respondí mientras entrábamos en la escuela, Nico ya me esperaba en la entrada.
- Buenos días, compañero - le dije.
- Buenos días - respondió viendo con intriga al chaval a mi costado.
- Nico, él es Lucas, le encontré camino a la escuela. Lucas, él es Nico, mi mejor amigo.
- Un gusto, Nico - mencionó el desconocido.
- Igualmente - le contestó - ¿Y eso que viniste caminando? - me preguntó sorprendido.
- Sí - respondí sin intención de dar explicaciones frente a un desconocido.
- Vale... - respondió.
Con tanto lío ni siquiera pensé en buscar a Ania, quien seguro estaba con Katya y no tenía la más mínima intención de verme.
- Nico, ¿has visto a Ania?
- La vi hace unos minutos en el casillero de Katya, estaban hablando tranquilamente - no me sorprende en lo más mínimo.
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Mascarilla Perfecta (En Curso)
RomanceNate Jefferson, joven de 17 años con un futuro por delante y miles de metas por trazar, pero al igual que toda la humanidad, condenado por una pandemia que no parece tener fin, haciendo que la vida de todos se detenga indeterminadamente. ¿Existirá a...