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La mujer se quito su abrigo y se lo puso con tranquilidad, el frio disminuiba poco a poco siendo reeempezando por un calor leve pero relajante.

Después de caminar un rato se dio cuenta de algo. No sabia él nombre de su salvadora, eso hizo que se sintiera un niño malo, ella lo habia salvado y él nisiquiera preguntó por su nombre.

¿C-como te llamas? -Preguntó alzando su cabezita levemente para encontrarse con la mirada tranquilizante de su salvadora.

Soy Ryuku ¿y ? - contesto con un aura rara para él niño, pero que no desagradaba a Hiro.

Soy Hiro -Respondio bajito pero lo suficiente como para que fuera escuchado por Ryuku.

presentate a Hiro -dijo la mujer llamada Ryuku mirando al pequeño que parecia ser un poco muy timido.

Hola, y-yo me llamo Otoko- dijo él niño que tenia una herida en él brazo mirandolo timidamente y que parecia estar llorando hace minutos con miedo, ahora que lo examinaba bien parecia que él niño estúbo en las misma condiciones que él.

u-un gusto conocerte Otoko -Respondio con calma Hiro, empezando con una bonita amistad.

Presente†

Otoko, todo estara bien... No te preocupes Otoko -susurro Hiro en él oido de su casí hermano, abrazandolo mientras finas lagrimas saladas se desvordaban de sus ojos y la gravedad hacia su único trabajo.

Otoko correspondio él abrazo que Hiro le dio, y pequeñas lagrimas traicioneras escapaban de sus ojos otra vez.

Hiro le limpio las lagrimas que se caian en las mejillas de Otoko y lo miro.

Todo va a estár bien… -Hiro en un pequeño susurro su mundo de fantasias empezo ignorando su realidad, Tal y como habia hecho su madre.

The place of murder Donde viven las historias. Descúbrelo ahora