Hunter | One-Shots

Esclavitud (2/2)

Hunter dejó escapar un ahogado llamado al ver lo que estaba enfrente suyo. —Alisann…— susurró con terror. Dos guardias zygerrianos traían a rastras a una debilitada joven y la tiraron frente a los cuatro clones. Alisann estaba plasmada contra la tierra, con sus manos esposadas y su cuerpo cubierto por una capa de mugre por el trayecto. El escuadrón 99 la miraba anonadados, pero quien estaba más asustado era el sargento. —¡Alisann!

Hunter pensaba lo peor, pero cuando la chica se quejó mientras recuperaba la conciencia, fue un alivio al saber que seguía con vida. Su llamado había sido suficiente para que Alisann despertara.

Ella gimió por el dolor anterior, la electricidad corría por su cuerpo causándole adormecimiento y dolores como si tuviera su piel cubierta por moretones. Alisann levantó su vista y miró a Hunter, dedicándole una sonrisa a través de su sufrimiento.

—Vaya, vaya. Con que si tenían compañía. — el zygerriano de cicatriz se acercó a paso lento, calculando cada movimiento. El corazón de Hunter comenzaba a acelerarse.

—No des ni un paso más. — el sargento ordenó con desprecio, matando con la mirada a su presa.

El líder esclavista ríe ante la pobre amenaza. —Una joven con buen aspecto valdría una fortuna. ¿No crees? — su mano sostuvo el mentón de Alisann, obligando a que levantara la cabeza y mostrará su rostro. Ella torció sus labios, asqueada por el roce. —Imagina todo lo que podrías hacer…

El zygerriano calló al instante cuando el liquido pegajoso saltó hacia su rostro, Alisann le había escupido. —Yo no soy esclava de nadie…

Pero una fuerte bofetada la obligó a girar la cabeza, la mejilla de Alisann comenzó a arder, sintiendo el la humedad de sus ojos brillantes asomarse. Esto provocó una fuerte reacción a los cuatro clones, quienes se trataron de levantar en contra del esclavista, querían defender a la chica, pero las cadenas impedían sus acciones. Y como castigo, una fuerte descarga eléctrica los envolvió desde su cuello.

—Entonces vas a morir. — el líder esclavista agarró a Alisann de sus cabellos de forma bruta, como si estuviera a punto de arrancarlos y ella gimió ante el irritante dolor.

Hunter forcejeo y se abalanzó hacia adelante entre la desesperación e impotencia, sus ojos reflejaban el terror con la piel erizada bajo su opacada armadura, clamando por el nombre de la chica. Era como si en el fondo de su ser hubiera un pequeño cristal a punto de romperse y sus temores estuvieran dominando su cuerpo.

Hasta que un fuerte rugido los sacó de la desesperanza.

Una gran jaula cerca de su posición se abrió de golpe, levantando las piedras entre el polvo, con espanto, el grupo y compañía vieron como una criatura de contextura gruesa y fuerte salía hecha furia, comenzando a causar caos contra los guardias.

Tech levantó su ceja entre su expectación. —Un rancor adolescente violento no era la distracción que tenía en mente.

—Ese es su problema, nosotros nos vamos de aquí. — Wrecker comentó y actuó rápido, dio un gran estirón y gracias a su fuerza rompió las cadenas al igual que sus grilletes de un solo golpe.

Era una excelente oportunidad, mientras que el animal destruía la guardia con un feroz rencor contra ellos, el escuadrón 99 comenzó a liberar a los tres esclavos presentes. Hunter ni siquiera lo pensó, tras ser liberado con la ayuda de su equipo, corrió inmediatamente donde Alisann, pero fue demasiado tarde, apretó sus dientes ante la derrota al ver como el líder esclavista tomaba a la joven y se escapaba entre su bestia voladora. Ella pronunció su nombre entre gritos de auxilio que se desvanecían ante el entorno del caos.

Hunter estaba nublado ante la sensación de angustia, pero no lo reflejaba. Ni siquiera le importó que aquella niña perdida era en realidad el rancor rebelde, lo que más le importaba ahora era rescatar a su chica.