Wonder Woman y Tú | A Mi lado

CAPÍTULO 8

Cuando _________ ingresó al lugar en donde todas parecían haberse reunidos para recibir a la princesa, vió a su amada Diana junto a la Reina en medio de un círculo que habían formado las Amazonas en el centro rodeándolas. Los gritos de euforia cada vez eran más intensos, pero _________ notó que Diana tenía cierta tensión encima. De hecho, a pesar de la emoción que había a su alrededor, ésta solo sonreía a medias y miraba a los lados en busca de salir de aquella situación. __________ la conocía lo suficiente como para reconocer aquellas expresiones.

Ante la presencia de Diana el corazón de __________ parecía que iba a estallar de la emoción y su boca de pronto pareció estar seca. El tiempo que había estado esperando por Diana había sido mucho para ella, pues desde un inicio de su existencia la princesa de Themyscira siempre había estado a su lado.

-La Reina me pidió llamarte- dijo la Amazona que había ido en busca de __________ y guiado hasta allí- por la princesa y por algo más...

________ dirigió su mirada a la Amazona en busca de que le aclarara lo último, pero cuando dirigió su mirada a ésta, a cierta distancia se encontraban otras dos Amazonas alejadas de lo demás. O eso ella creía, ya que una de ellas tenía una vestimenta que no suelen utilizar. Eran dos rubias, pero una tenía apariencia de ser mayor y la otra no. Segundos después reconociendo que una de las rubias se trataba de Elissa.

-¿Qué sucede?- murmuró _________, pero antes de que respondieran a su pregunta la voz de la Reina se hizo escuchar.

-Hemos vivido bajo la tensión mucho tiempo- comienza a decir la Reina, mientras _________ trataba de buscar la mirada de Diana pero ésta pareciera estar en otro mundo-, más de lo que quisiéramos admitir, esperando el día en que tuviéramos que utilizar una vez más nuestras fuerzas y dar nuestras vidas en un intento de que este mundo no fuera cubierto por un velo de total oscuridad...- Hipólita hizo una pausa y después miró a su hija, quien de igual manera le sostuvo la mirada y le sonrió, pero con aquella sonrisa que no solía transmitir lo mismo que sus ojos- desde un principio esa era la idea, bueno, mi idea con tal de no sacrificar lo más preciado para mí...- siguió hablando la Reina- pero la verdad es que desde un principio se nos fue otorgado la solución para darle fin a la guerra que no se pudo concluir siglos atrás, y finalmente hoy podemos decir que aquella guerra por fin ha llegado a su fin...

En cuanto la Reina dio aquella pausa nuevamente se escucharon los gritos de euforia por parte de las Amazonas, menos de _________ y Elissa. La primera estaba aún con su mirada fija en la princesa, mientras que una presión extraña nacía en su pecho y a su abrumada mente llegaban las palabras de la Reina sobre la conversación que tuvieron la noche anterior. Por otro lado estaba Elissa quien observaba a __________ a la distancia, en su pecho sintiendo preocupación al ver el desánimo evidente en el rostro de la última mencionada.

-Mis intenciones fueron apartarla de su cruel realidad y cuidarla como mi más grande tesoro- volvió a hablar la Reina- pero como toda Amazona cumplió con su papel a pesar de los miles de obstáculos que le interpuso su propia madre y luchó por su gente- nuevamente se escucharon los gritos y en cuanto cesaron la Reina volvió a hablar-, esto cumpliéndose porque hubo aunque sea una de ustedes que decidió no seguir las órdenes de su Reina y darle la libertad que tanto necesitaba nuestra princesa de Themyscira.

Varias miradas fueron a parar en ___________, recibiendo halagos por las Amazonas que se encontraban cerca y gritos de emoción por las que se encontraban lejos. Pero ello no fue lo que se ganó la atención de _________, sino el hecho de que Diana por fin dirigió su mirada a ella y una vez más sus miradas pudieron encontrarse en esta vida.

De pronto ___________ sintió que todo se detenía así como también el ruido de alrededor, solo era ella y Diana. Ambas mujeres observándose con sentimientos de tristeza ante un nuevo reencuentro, pero en aquellas miradas de tristeza había algo más que ninguna de las dos quería saber de la otra.