Prólogo

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Cuando el relámpago iluminó su habitación, sus pesadillas se disiparon. Aun con los ojos adormilados miró la ventana, fuera la noche era tormentosa, tanto que los truenos apenas la dejaban escuchar su propia respiración.

Se incorporó y salió de la cama, sintió el piso frío, pero no le importó, tomó una bata y salió al pasillo. Este estaba frío y sepulcralmente silencioso, de no haber sido por la lluvia que caía fuera habría escuchado los latidos de su propio corazón que palpitaba con fuerza.

Tenía una sensación extraña por todo el cuerpo mientras comenzaba a caminar hacia la habitación de sus padres. La luz apenas iluminaba su camino, pero no importaba, conocía el trayecto de memoria.

Al girar en la última esquina junto a la habitación a la que se dirigía, se detuvo en seco.

Sangre manchaba la aterciopelada alfombra de color azul ultramar, haciéndola ver morada a la luz de la luna que se colaba por las ventanas que estaban un poco más adelante.

Se cubrió la boca con las manos, pensó en gritar, pero no fue capaz. Aun así, con una palidez propia de la luna, siguió el rastro que terminaba en la habitación de sus padres

Miró la puerta desencajada y tuvo miedo de entrar... pero lo hizo. En cuanto logró ver el interior, su corazón aumentó la velocidad de sus latidos hasta llegar al punto del dolor.

El esbelto cuerpo de su madre yacía en el piso, justo en medio de una gran mancha roja: sangre.

Las lágrimas le nublaron la vista antes de comenzar a caer, quiso correr con ella, pero no pudo, estaba paralizada. Entonces comenzó a temblar violentamente.

Otro relámpago tronó e iluminó la habitación. Alguien estaba de pie, justo al lado de su madre y justo en ese momento la miró.

Supo que debía gritar, pero el miedo seguía siendo demasiado y le resultó imposible emitir un solo sonido de sus labios.

Entonces quien estaba junto al cuerpo de su madre se le acercó y el brillo de un cuchillo la hizo soltar un chillido, y un dolor agudo en el cuello la hizo gritar... o al menos intentarlo. La vista se le nubló y sus fuerzas flaquearon.

Lo último que observó fueron unos fríos ojos mirándola con desprecio. Mientras la vida la abandonaba.

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¡Hola!

Gracias por comenzar a leer esta historia,  por favor, si te agrada acompáñame en esta aventura por este mundo mágico medieval lleno de aventuras y reinos que visitar, leyendas que narrar, y objetivos por los cuales luchar. 

La historia apenas está por comenzar, acomódate y toma una galleta mientras lees 🍪. Puedo ofrecerte también una tasa de té que parece café ☕️, pero hasta ahí llegan mis sobornos, no tengo mucho más que ofrecer aparte de páginas llenas de niños inocentes correteando por las calles, leyendas y recuerdos, además de viajes y gue... Basta, debo callar, un poco más y contaré todo lo que he escrito hasta este momento, por favor tú solamente disfruta.

Llevo varios capítulos escritos pero mis expectativas y tareas no me permiten escribir cuanto desearía, así que prometo subir un capítulo los jueves cada 2 semanas, esperando que los capítulos no se me terminen muy pronto, en caso de que así sea les avisaré.

Por favor siéntete libre de comentar todo lo que quieras, siempre y cuando sea con respeto, intentaré responder tanto como pueda. Oh, y también te invito a votar si te gusta la historia, no toma más que un click 😉.

Sin más que decir, te veo en el próximo capítulo 💙

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