✬𝑷𝒓𝒐𝒎𝒆𝒔𝒂𝒔 𝒆 𝒊𝒏𝒗𝒊𝒕𝒂𝒄𝒊𝒐𝒏𝒆𝒔✬

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Vera Nair

La habitación de Martha era un poco más amplia que las demás, eso probablemente era porque ella pertenece al consejo. Su compañera de cuarto no estaba y tampoco quise preguntar.

Me sorprendió la amabilidad con la que Martha me había tratado, tomando en cuenta que cuando me saludó parecía un tanto incómoda, podría adivinar que algo debió suceder el año pasado.

– es más grande que la mía – opiné durante mi escaneo a mi alrededor, Martha entendió rápidamente que me refería a la habitación.

– es porque es del consejo. Solo son dos habitaciones bastante aisladas, por lo que ocupan mucho espacio – aclaró mientras acomodaba su escritorio.

– para dos personas es... enorme, pero justo al mismo tiempo.

– es que también está pensado por si son tres chicas las que tienen que dormir aquí.

Esa misma tarde había alistado una maleta improvisada con lo necesario para pasar la noche fuera y le avisé a Margaretha, lo cual se extrañó por lo que procuré evadir sus preguntas. Dejé dicha maleta en el suelo frente a la cama de Martha y me senté en un puf que también había en el lugar.

– siéntete cómoda, después de todo pasarás la noche aquí – dijo Martha con amabilidad acomodándose en el puf de al lado.

– gracias.

– supongo que las preguntar las harás tú ¿me equivoco?

– así es – confirmé.

– de acuerdo, te escucho – como había pensado, ella estaba totalmente dispuesta a hablar, pero no tenía manera de saber si lo haría con la verdad ¿realmente era de fiar?

– antes tienes que hacer una promesa – me giré hacia ella con total seriedad y distinguí la expresión en su rostro que veía esto como algo infantil. No puedo negar que yo también pienso eso, sin embargo, no me imaginaba una manera más lógica de hacerlo...

Y se que ella haría esto.

– ¿una promesa? – preguntó incrédula.

– sé que es tonto, después de todo tampoco tengo como saber que la cumplirás, pero... – no me dejó continuar.

– sería incapaz de romper una promesa que te haya hecho – interrumpió con una tierna sonrisa ¿es que hay algo que debería recordar?

– de acuerdo – murmuré impactada.

– ¿qué debo prometer?

– debes... debes decir la verdad, al menos por esta noche – Martha extendió su mano con su puño cerrado y solamente levantando su meñique a la espera de que yo entrelacé el mío con el de ella. Observé su mano por un segundo, estaba sorprendida de su reciprocidad.

Al final también le ofrecí mi meñique, al fin y al cabo, era yo quien quería esa promesa ¿por qué negar el sello?

– muy bien, te escucho – dijo mientras se acomodaba de brazos cruzados y se dejaba caer hacia atrás.

– entonces... – medité adecuadamente mi primera pregunta, pues había tantas cosas que quería saber sin necesidad de delatarme tan precipitadamente.

– ¿por qué estabas tan incómoda cuando hablamos en el pasillo? – cuestioné decidida, esa me parecía una pregunta adecuada para comenzar.

La chica tardó un buen rato en responder, tal vez se tomó su tiempo para pensar en si mentir o no, o tal vez para formular una respuesta clara. Lo único que rogaba era que no rompiera su promesa.

。゚・☆ 𝖑𝖆 𝖆𝖈𝖆𝖉𝖊𝖒𝖎𝖆 𝕺𝖑𝖊𝖙𝖚𝖘 ☆・。゚(identity v)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora