Latidos Del Corazón - NamJin

Capítulo 15 ↬ Lee Haneul

Una joven chica iba con una sonrisa coqueta plasmada en su rostro, mientras caminaba hacia su encuentro. Iba demasiado arreglada y hermosa que cualquier hombre caería ante ella, todos excepto uno, Kim Seokjin, hijo de los Kim, socios de sus padres. Conocía muy bien los antecedentes del joven Kim, guapo, popular, importante, coqueto, seductor y un hombre increíble en la cama, el paquete entero además de ser uno de los solteros más codiciados de la ciudad y del campus Moon, tal vez ya no estudiaba pero sabía lo que ocurría.

Haneul era una joven que salió rápido de la universidad y trabajaba con sus padres, conocida por su carácter ambicioso y grosero, era una perra por más agradable que pareciese a la vista, lo que deseaba lo conseguía sin importar el precio de eso, su belleza y puesto eran su mejor arma, nunca fallaba según los demás, y su objetivo siempre fue encontrar a alguien que estuviera en sus espectativas y ese era Kim Seokjin.

Estaba bastante segura de que sería el partido perfecto para él joven luego de que la señora Kim se le acercara a conversar, era su oportunidad de hablar sobre el famoso Seokjin y ver que podía sacar de todo eso. Al final se arreglo una cita a ciegas, por lo que encantada accedió.

Pero el día de su primer encuentro a pesar de que el chico se comportó caballeroso, respetuoso y simpático, algo que no era común en el joven mujeriego pero lo dejó pasar, pero había algo que no la dejó muy convencida luego de que este se ausentara en los baños y luego regresará, alterado, sudado y jadeante. No pregunto nada, solo actuó con preocupación para tratar de averiguar algo más.

Y luego lo vio, Namjoon, hijo de otros empresarios de apellido igualmente Kim, otro futuro candidato que tenía en mente, sin embargo lo dejó fuera de sus pensamientos cuando se supo que estaba en una relación con su prima, Mi-Suk.

Este iba saliendo del baño luego del castaño, y lo que más la hizo sospechar fue que estaba en las mismas condiciones que Seokjin, con los labios hinchados, rojizos y con marcas de dientes, con la ropa desordenada, y jadeante, eso la alteró a gran escala pero callo.

Luego de eso, al día siguiente tomó la iniciativa de hablar con los padres de Seokjin, sus intenciones eran claras, estar con Seokjin sin importar nada, los padres de este estaban tan encantados de lo dulce que fue y lo bien que salió su cita, por lo que ella propuso que se proclamará oficialmente un compromiso pues estaba más que bien su situación y él no estaría en desacuerdo.

En su pequeña cabeza solo cabía la idea de que el chico gusto de ella por su forma de ser, así que luego de llamar a Seokjin contándole todo lo ocurrido se sentía poderosa, conquistar a Kim sería un reto pero lo haría posible, solo para ella, la envidia de muchas mujeres.

Y fue cuando Seokjin la llamó para citarla nuevamente que su ego subió más, todo iba a la perfección, se arreglo pampante y coqueta, lista para lo que se venía, sin embargo, no contaba con encontrar a Seokjin con una mirada fría y calculadora y un semblante intimindante. Vestido muy diferente a su primera cita, por lo que con un poco de miedo continuó.

- Hola Jinnie, me alegra tanto que estemos en otra cita nuevamente, esto es... -no pudo terminar la frase al ser interrumpida por la mano del castaño diciéndole que no dijera ni una palabra, lo miró confundida y luego acomodo su cabello.

- ¿Cómo te atreves Lee?- el castaño la miró con una molestia que incluso ella se asustó, eso no iba por buen camino.

- No entiendo...- trato de fingir no saber nada sobre lo que hablaba Seokjin, trato de que su voz no temblara ante la severidad en la del chico.

- ¿Cómo mierda te atreviste a hablar con mis padres y establecer algo a mis espaldas sin mi consentimiento?

- C-creí que como nos llevamos e-excelente en la cita todo estaría bien... Además te comportaste amable y muy lindo...- los nervios y el terror la vencieron, no pensó que se pondría de esa manera, incluso se estaba arrepintiendo de lo que hizo pero no se iba a dar por vencida.