La chica perdió todo su autocontrol. Desató toda la ira que había ido conteniendo , para tapar la tristeza.
–¡Cómo has podio!–volvió a dar otro golpe en la pared—Mark...no.
No aguantó más y cayó al suelo abrazando sus rodillas. Perdió la cuenta de las horas que pasó allí llorando , sintiendo como el dolor la quemaba por dentro hasta arrasarla y dejarla hecha cenizas.
Su madre entró y sin dudar un instante la abrazó. No soportaba verla llorar , y soportaba aún menos saber que no podía hacer o decir nada para reconfortarla , porque lo que había ocurrido no se iba a solucionar.Después de estar abrazada a su madre en el suelo la chica decidió hablar.
—Mamá...
—Eh...—susurró la mujer—todo va a estar bien ¿si? Verás que con el tiempo irás haciéndote a la idea.
—Pero...yo no quiero hacerme a la idea , mamá—dijo ella entre sollozos—le quiero a él.
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Dime que me quieres
عاطفيةIsabella , una adolescente de 18 años , acaba de empezar la carrera de psicología y está rota. Mark es un chico de 20 años sin ningún tipo de preocupación , que se dedica a disfrutar de la vida. ¿Podrá Isabella volver a sentir algo después de su te...