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Ella solo se corrió de lugar para dejarme entrar. Todos me miraron con los ojos bien abiertos como si hubiera cometido el peor error de mi vida. Divise el único lugar disponible que era allí, frente a Venable. Es como si la desgracia me persiguiera. La miré y saqué un cuaderno, un lápiz y mis lentes no necesito más, pero me da tanta vergüenza que me vean con lentes que solo me limité a mirar mi cuaderno y escribir lo que ella tenía en la pizarra.
-Bueno, ¿en donde quedamos?- ella se paró con más autoridad aún de la que ya había visto, me di vuelta para mirar a los demás y a casi todos se les veía el miedo en su mirada. -¿alguien me va a contestar?- nadie dijo nada. -si así lo quieren- Venable camino devuelta al escritorio miró su libro de clase y habló.
-Lewin, señorita Lewin, sería usted tan amable de decirme ¿en qué quedamos antes de que nos interrumpiera la señorita Betancourt con su presencia?- podía sentir las miradas sobre mi.
-estábamos revisando las crónicas, Miss Venable- se escuchó tímida.
-esta bien- volvió a caminar hacia el pizarrón, escribió y procedió a hablar -"yo no tengo amigos, tengo amores", ¿alguien lo conoce?- pregunto con superioridad.
Levante mi mano, ella me miró y asintió.
-"la amistad es burguesa, es una construcción burguesa y masculina, el compadre, el pata... yo tengo amores", Pedro Lemebel, famoso escritor chileno, parte de la comunidad lgbt. Sus crónicas son muy famosas dentro del mundo y todos sus libros son de estas excepto "tengo miedo torero" que fue su única novela y también es muy reconocida- la mire con seguridad pero por dentro estaba temblando.
-bien- ví por un momento como se iluminaban sus ojos pero al segundo se tornaron fríos y penetrantes.
-como dice Betancourt así es, Lemebel es un famoso e importante escritor chileno. Era el mejor amigo de Gladys Marín vieron eso en historia o lo verán próximamente.-
Y así transcurrió la hora, recogí mis cosas, cuando Venable me dirigió la palabra
-Betancourt... así que Lemebel ¿no?- lo dijo en un tono bastante amable pero frio y distante a la vez
- sí, es de mi ciudad natal y bueno, mi escritor favorito es el- me miró con superioridad como si yo no supiera de lo que estaba hablando.
-¿libro favorito?- estaba expectante
- de perlas y cicatrices- su cara cambio y puso una leve expresión de asombro
-política, crítica social... también es el mío.- tomo sus cosas y se fue. Estaba impresionada, había compartido su libro favorito conmigo y ya no se notaba tan distante como siempre, aún lo era pero no como siempre.
Las chicas estaban esperándome afuera para ir a buscar un rayito de sol, ya que estamos en verano pero la institución es realmente muy helada. Nos sentamos en la fuente, creo que es mi lugar favorito de aquí. A lo lejos pude divisar una silueta muy linda, venía hacia nosotras con un vestido de verano y con su cabello suelto, es muy bonita y sí, sí se preguntan era Sandy.
-Holaa, ¿cómo están?-Se dirigió a las 3 muy amablemente
-bien y usted ¿qué tal?- comentó Amanda llevándose toda la atención
-bien, perfecto, veo que te gusto el lugar- hablo dirigiéndose a mi
-sí, creo que se volvió un lugar que me transmite paz
-¿que tal tu primera clase? Te toco con Venable ¿no es así?- me hizo un gesto muy chistoso, me abrió los ojos y sonrió hacia abajo
-sí- nos reíamos mientras le contestaba -fue bastante agradable, no me lo esperaba. Hablamos de Lemebel y bueno, eso, creí que con lo hostil que había sido cuando llegué, sería aún más desagradable en clases pero no fue así.
-Lemebel... ¿quien es?, no me suena- habló por fin Magda
-por eso a ustedes no les va bien en esa asignatura- se reía Sandra -Bueno, espero que te vaya mejor en tus otras clases Helena.
Se dio una vuelta y se fue, mientras se iba tocaron la campana, lo que quería decir que volvíamos a clases las chicas me fueron a dejar a mi aula, la cual estaba vacía así que me senté en el último lugar, lo más alejada y escondida que pude. Comenzó a entrar gente y al último entró la rubia, cerró la puerta y dijo
-nueva, levántate y preséntate.- es como si me odiara pensé. Me levante con seguridad, no iba a dejar que alguien me intentara hacer menos o mostrar que soy al alguien insegura, lo soy, pero eso es algo que solo guardo para mi.
-Helena Betancourt, como saben soy la nueva, hablo distintos idiomas, toco varios instrumentos, soy Capricornio así que no pierdo jamás y odio las matemáticas. Esos son los datos importantes sobre mi señorita...- me callé hasta escuchar su nombre, me lo sabía, claro, ya que otras personas me lo habían dicho pero jamás lo había escuchado de ella, jamás se había presentado conmigo.
-Cate Blanchett, su profesora de matemáticas, así que ahora hágame el favor de sentarse y poner atención ya que si no le gustaban las matemáticas antes, ahora menos.

La clase se me hizo eterna esta mujer tiene un complejo de superioridad enorme al igual que Venable, no entiendo como son amigas de Sandra si ella es tan amable. Tocó la campana y lo primero que hice fue tomar mis cosas e irme, se me hizo tan desagradable la instancia allí adentro que solo quería tomar un poco de aire, al salir me encontré con Magda y Amanda caminando hacia mi.
-¿y?, ¿que tal Blanchett?- preguntó Magda
-horrible, es un ser humano despreciable, ya había tenido problemas con ella antes de saber que ella sería mi profesora y siento que se desquitará todo lo que queda del año conmigo
-¡¿Cómo?!, ¿Peleaste con Blanchett?- Amanda estaba asombrada, ¿por qué todos cuando saben tienen la misma reacción? -¡Helena! Eso es como pelear con la mismísima Venable, aunque un rango más abajo. Una vez discutí con Blanchett, ella me mandó al despacho de Venable y casi me expulsan, pero antes de eso las dos me hicieron sentir tan mal conmigo misma. Son muy hirientes. Si puedes evitar pelear con ellas hazlo-

olvidar-teDonde viven las historias. Descúbrelo ahora