Kassia debe dividir su amor por dos hermanos, quienes acaban de mudarse desde España para ponerla a prueba con sus sentimientos mientras lucha por ser la campeona nacional junto a su equipo de porristas en la ciudad de New York.
Mientras tanto, debe...
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Kassia
Beso la mejilla de mi padre y bajo del auto con mis cosas para caminar en dirección a la entrada del edificio, a lo lejos diviso a mis amigos hablar, entre ellos a André, pero al posicionarme al lado de Clara, saludo con la mano y evito su contacto visual. Entramos cuando el timbre resuena y me dirijo a mi casillero para guardar mis cosas, saco mis libros y cuelgo mi bolso para ir hasta el aula de clase, al entrar veo cómo el mismo chico está sentado en mi lugar y mi vista baja a la profesora que me mira por encima de sus lentes.
—Taylor deberá sentarse allí en todas mis clases, mientras tanto, puede sentarse con el señor Carvajal —suspiro pesado y sin asentir ni decir nada camino hasta el primer banco de la esquina, dejo mi libro sobre el escritorio y lo abro sin mirarlo, la profesora cierra la puerta cuando todos estamos ya dentro e inicia su explicación.
—Oye —escucho a André susurrar a mi lado, pero no le presto atención—, ¿Podemos hablar?
—Déjame en paz —digo seco y subrayo mi libro con lápiz.
—Es importante para mí, Kassia, en serio necesito que me perdones —ruedo los ojos y lo miro.
—¿Y qué es importante para mí entonces, André? —pregunto enojada y antes de que la profesora nos viera y retara, sigo con lo mío dejándolo a un lado con sus pensamientos, y yo con los míos.
Mis manos tiemblan y su cercanía me produce pánico, no sé cuando llegamos a esto, pero el saber que hoy me darían los resultados del análisis me causa temor, no le diría nada a André, estoy asustada, si, pero él no tiene el por qué saber sobre mi ya que él ni siquiera se preocupó antes, al no decirme sobre su enfermedad. Respiro agitado y me volteo un poco hacia atrás, donde se encuentra Fred mirando la pizarra mientras escribe en su cuaderno, bajo mis hombros y trato de volver mi atención a la clase antes de desaprobar.
Siento mi teléfono timbrar, dejo de escribir para sacarlo de mi pantalón y leer el nombre de Ulises en la pantalla, lo guardo enseguida antes de que André lo viera y disimulo cómo si nada pasara. Cuando siento que mi teléfono otra vez vibra, esta vez en mi mano, bajo su brillo levantándolo un poco para poder leer su mensaje.
¿Estás bien? 11:41
No he sabido de ti en dos días, ¿Acaso peleaste con André?
11:43
Trago saliva y abro el mensaje para responderle que luego hablaría con él, pero que estoy bien y muy atareada. Guardo mi teléfono minutos más tarde, al igual que mis cosas cuando el timbre indicando el almuerzo se oye a lo lejos, así que me apresuro para no hablar con André y salgo del aula siendo una de las primeras, me acerco a mi casillero y acomodo mis libros para sacar mi bolso con mi uniforme. Mientras todos se van a la cafetería, yo camino en dirección opuesta al gimnasio vacío para poder estar un tiempo a sola, con mi nerviosismo al esperar un mensaje de Donovan.
