Marella despertó antes que el rey. Las primeras luces del sol ya estaban más arriba y la playa que en su oscuridad había guardado la intimidad de ambos poco a poco se veía consumida por la luz.
Adormilada al principio, Marella bostezo y se estiró como pudo... fue cuando se dio cuenta y los recuerdos le llegaron como una ola repentina.
Su respiración comenzó a acelerarse... Por alguna razón que desconocía se sentía terriblemente inquieta. No sabia si era emoción, miedo o algo más... Simplemente quería salir corriendo de ahí y alejarse lo más que pudiera.
Con lentitud, miro de reojo al rey, que aún dormía plácidamente pegado a su espalda, con su poderoso brazo sobre ella.
Con el cuidado del mundo, salió como pudo sin despertarlo.
Suerte que soy pequeña. Pensó sinceramente mientras lo observaba de manera atenta. El rey apenas si se movió, pero en su cara se dibujo una suave y dulce sonrisa... ¿estaría soñando con ella?
Dio un paso hacia él y se detuvo, negó con la cabeza y de inmediato retrocedió varios pasos... Se giro para literalmente correr al mar y desaparecer en el agua cristalina.
"Helada" no describía por completo la temperatura del agua en Aldebaran. No le sorprendería ver un poco de hielo en el área. Sin embargo no podía quejarse ya que eso le ayudó a concentrarse. Se estremeció antes de poder adaptarse. Su cola de foca tardo un poco más de lo normal en aparecer debido a su nerviosismo, probablemente.
"Estas son otras aguas Marella" se dijo a sí misma
"Ten cuidado. El rey dijo que este lugar estaba lleno de orcas"
Trago saliva con fuerza solo de pensar en el sonido que hacían
Nado lo más rápido que pudo hacia el fondo, donde recordaba que estaba el castillo de Aldebaran.... Bueno... Ahora sería su castillo también.
Su corazón latía tan fuerte contra su pecho que incluso era capaz de escucharlo
Apenas vio la forma del castillo se lanzó en picada, agitando velozmente su cola intentando llegar más rápido... Jamás espero que ese chico se cruzara de la nada...
Aunque hizo todo para no chocar contra el menor de los príncipes... Inevitablemente se estrelló contra el pobre. Dieron varias volteretas antes de poder equilibrarse nuevamente. Con la respiración acelerada por la carrera, Marella miró al joven príncipe que confundido y asustado también la miraba a ella.
- Joven príncipe...
Parecía más un reclamo que un saludo.
- Alteza
El chico hizo una reverencia
- Perdón por cruzarme en su camino...
Marella agitó las manos al mismo tiempo que negaba con la cabeza.
Ninguno había sido capaz de percibir al otro. Lo que la llevaba a pensar que el príncipe también había estado nadando a gran velocidad y probablemente también había estado inmerso en su mundo antes de estrellarse violentamente contra ella...
- Por favor no digas eso. Fue un error de mi parte, Yo...
- Nyami
Marella lo miro confundida
- ¿Cómo dices?
- Mi nombre es Nyami alteza. El menor de tus... Nuevos hijos... Debería llamarla madre
Eso fue un profundo golpe para Marella. Parpadeo un par de veces y después de abrir y cerrar la boca sin conseguir decir una palabra, se arriesgo a decir con el mayor tacto del que le fue posible
- Ah... Príncipe Nyami, no me malinterpretes, estoy segura de que tú y tus hermanos son los hijos soñados de todos los mares ... Pero no es necesario que me llames madre. Es...
- Raro
Termino él.
- Si... Mucho... Muy.
Compartieron una risita tímida y casi apenada
- Lamentablemente para ambos...
Dijo el príncipe aún apenado
- Es parte de nuestra cultura... Si alguien escucha que la llamo por su nombre, deshonraré nuestro reino, a mi padre y a mis hermanos.
Marella se mordió el labio.
- No es algo que disfrutaré pero... Soy capaz de entender y respetar tú cultura.
Dijo resignada
- También será muy raro y difícil para nosotros... Es decir... mi segundo hermano casi tiene tú edad... su edad
Se corrigió rápidamente
- Nyami... Aquí no hay nadie más
El príncipe acuante miró a su alrededor... En efecto estaban solos.
- Tú edad
Sonrió...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
