Paró un momento su labor y se sentó en el escritorio de su viejo cuarto. Cinco meses de regreso y había decidido dejarlo todo cual estaba desde que llegó a la universidad. Odiaba que los viajes lo llenaran de nostalgia; se supone que ya debía estar acostumbrado. Y, sin embargo, ahí estaba, sosteniendo con fuerza una fotografía de Su Grupo: aquellos que siempre destacaban, pues eran brillantes; tenían dinero, sí, pero también estilo y un montón de habilidades, para variar. Se habían vuelto su "familia de América" desde los diecinueve años. Entendían mejor que nadie lo que era vivir presionados, se apoyaban los unos a los otros... y aún así tenía que dejarlos una vez más.
Una sonrisa amarga recorrió su rostro pensando en la despedida que venía. Cerró los ojos, recordando muchas de las locuras que la pronta madurez tiraría por tierra. Contenía las lágrimas justo cuando lo golpeó la memoria de Ese Día...
<< Zemo entraba al recinto con más apatía de la normal. La universidad suele ser soportable, pero esa mañana se tornaba especialmente un asco. Caminaba por los pasillos junto a Tony y a Joaquín; el primero estaba extremadamente concentrado en su teléfono (no daba mucha importancia al inicio de semestre), mientras que el segundo chico iba destrozado consolando a su amigo con tono lastimero.
- ¿Ves? Te dije que no debíamos venir hoy, sé que hiciste eso por dolor - el menor hacía referencia a la broma de mal gusto que Helmut le había jugado a Strange.
- ¡Joaquín Torres, estoy bien! No necesitas hacer de niñera.
- ¡Pero, Hel!
- ¿Sabes qué, Jo? Tienes razón, Helmut está a punto de desmoronarse - decía Loki, mientras lo miraba a los ojos, fingiendo sentir compasión por su amigo -. ¿Y sabes qué lo haría sentir mejor? - el menor negaba con la cabeza - Dos frapuccino's medianos, con galletas y un pie de limón. Ten, ¡salva a nuestro pobre amigo desdichado! - entregó unos billetes al pelinegro, que salió corriendo en busca de la comida. Helmut rodó los ojos, y Rodhey y Tony se limitaron a reír con vista en sus celulares.
Sharon entró en ese momento, concentrada en su Ipad.
- ¿Me pueden explicar qué le hicieron al pobre Joaquín? Estaba casi llorando y dijo algo de ir a la cafetería de emergencia.
- Nada, Stephen terminó conmigo y parece que a él le duele más.- ¡Ah!, cierto...- No importa, ya me ocupé de eso - la observó, estaba pensativa -. ¿Tú qué tienes allí?
- Tengo un trabajito de delegada hoy. Vienen unos chicos nuevos desde Missuri. Resulta que son amigos de Steve, y Peggy me dijo que los tratara bien. - explicó con cierto fastidio.
- Te puedo ayudar con eso, si quieres. - se ofreció el castaño.
- ¿En serio?
- Seguro, me encargo del más difícil por ti
.- Bueno, no sé mucho de ellos. Steve dice que son "buenos chicos". Pero Peggy me dijo que Bucky era algo más... "especial".
- ¿De casualidad ese tal Bucky tiene cara de asesino? Porque acaban de entrar dos chicos que no he visto jamás en mi vida.
Las palabras de Rodhey hicieron que Carter y Zemo levantaran la vista. En efecto, ellos eran los más populares, conocían a todos y aquellos no estaban en sus radares; además, el look de "perdidos" de los jóvenes que entraban los hacía lucir bastante nuevos.
- Definitivamente yo voy a guiar a Sam - dijo la rubia con tono encantado, levantándose rápidamente para recibirlos.
Helmut la imitó, sin decir nada. No podía, en cuanto el chico de cabello largo entró al salón, todo se había paralizado. En fracciones de segundo lo analizó, nada impresionante a simple vista: atlético, con jeans y chaqueta, hermosos ojos azules. Pero su aura, eso era otra cosa. Fue instantáneamente atraído hacia él y únicamente reaccionó cuando Sharon lo estaba presentando.
- Es un gusto chicos. Y él es mi amigo Zemo.
- Helmut Zemo - estrechaba la mano del moreno.
- Samuel Wilson. Por favor llámame Sam.
- James Buchanan Barnes, todos me dicen Bucky.
- James - hizo un esfuerzo sobrehumano por actuar como una persona normal y no derrumbarse ante aquella voz -, es un lindo nombre... Parece que hoy seré tu guía.
- Así es. Las clases comenzarán dentro de una media hora, eso nos da tiempo suficiente para enseñarles lo básico - Sharon hablaba muy animada, nunca hacía los "tours" con tanta emoción... a decir verdad nunca había tenido un iniciado con el que quisiera pasar ese tiempo. Tomó el brazo de Sam y avanzó hacia la puerta - ¡Así que movámonos para que no pierdan su primera hora!
Bucky y Zemo la vieron desaparecer algo extrañados. Helmut le señaló la puerta, como caballero, y comenzaron su recorrido. Era la primera vez en tres años y medio que se emocionaba con un regreso a clases. >>
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Dos pasos [WinterBaron]
FanfictionAU Universitario. Drama juvenil. Romance. Helmut y James viven un año cargado de encrucijadas emocionales , que giran en torno a los problemas familiares de Zemo y a la única pregunta que salvará su futuro: "¿Cuál paso dar ahora?" Los Personajes p...