🥀↳˳⸙;; ❝ 5 ᵕ̈ ೫˚∗: 🥀

115 13 1
                                    

🥀🥀🥀

— Señorita — Yuri oyó una voz desconocida — señorita despierte. 

Sintió que alguien le sacudía los hombros mientras las palabras que escuchaba murmuraban contra sus tímpanos. 

Ella apretó los ojos una vez, antes de abrirlos solo para encontrarse con un dulce par de ojos maternales, que no mostraban nada más que preocupación. 

— ¿Quién eres tú?

— Llámame Sra. Jung ¿Está bien señorita? — preguntó con preocupación.

La ayudó a levantarse y a hacer que se sentara en la cama. Sintió un inmenso cansancio por no comer durante todo un día. Su estómago gruñó.

— Omo, ¿no has comido nada? 

— No lo he hecho ....

— Señorita por favor, sigame vamos a comer, se enfermará más si sigues con el estómago vacío; vamos.

No dijo nada mientras se levantaba y salía con la señora Jung. Tenía demasiada hambre, no pudo resistirse. La señora jung le sonrió mientras ambas bajaban las escaleras hacia la mesa. De alguna manera Yuri sintió un sentimiento maternal de ella. 

— Vamos señorita, coma todo lo que se le antoje.

— ¡¡¿¿ Todo esto es para mí ?? !! — preguntó asombrada por la cantidad de platos en la mesa.

— Si ¿No es suficiente?

— No, no, no, esto es más que suficiente, solo que no puedo comer todo esto sola.

— Solo coma lo que desee. — Respondió aquella dama con una sonrisa en su rostro.

Yuri le dio un mordisco a la comida. No podía negarlo, pero estaba delicioso.  Recordó que la había visto en algún otro lugar, pero donde?... no podía recordarlo. 

— Agh, ya no puedo comer más.

— ¿Quisieras algo más? Solo preguntame. 

— ¿Puedo irme a casa?

Aquella pregunta provocó que todo el comedor entrará en silencio por toda la habitación. Sintió que algunos de ellos la miraban, incluida la Sra. Jung. 

— Regresemos a su habitación, necesitas darte una ducha; te he mandado a comprar algo de ropa.

— Esa no es mi pregunta — La señora Jung solo suspiró pesadamente.

— Lo siento, pero no puedo responder a esa pregunta. 

Se levantó de la mesa y se dirigió a su habitación, Yuri miró sus pies y la siguió escaleras arriba, se dio por vencida. 

— Señorita, tome una ducha y descanse; el jefe estará aquí en cualquier momento. 

— ¿Ahh ese bastardo te dijo que hicieras esto? 

— Él no es tan malo señorita, lo sabrás cuando lo conozcas bien; es realmente dulce. 

Yuri se atragantó con el aire durante un rato antes de volver a hablar. 

|| ʙᴏss sᴡᴇᴇᴛʜᴇᴀʀᴛ || ʜᴀʀᴜᴛᴏ ᴡᴀᴛᴀɴᴀʙᴇ ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora