|| ʙᴏss sᴡᴇᴇᴛʜᴇᴀʀᴛ || ʜᴀʀᴜᴛᴏ ᴡᴀᴛᴀɴᴀʙᴇ ||

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— Aléjate de ella maldito bastardo !!!

Un fuerte ruido irrumpió en la habitación cuando Yuri cerró los ojos con fuerza. 

De repente se sintió liviana, no había nada en su cuerpo. 

Podía escuchar los sonidos de jadeos y puñetazos.

La curiosidad hizo que abriera los ojos y ahí fue cuando lo vio.

— Yoonbin ! 

Sus ojos se agrandaron cuando vio que estaba peleando con ese hombre. Sus ojos se llenaron de lágrimas. Ella estaba feliz de haberlo encontrado de nuevo ¿Pero así? 

— ¡¡¡Maldito te dije que la encontrarás para mi  !!!  ¡No que te aprovecharás de ella ! Que tipo de padre eres ?? !!!!! 

Yuri no podía creer lo que oía ¿Padre?  ¿Cómo?  Ella nunca tuvo padre. Pero, ¿qué estaba diciendo? El hombre no tenía fuerzas contra Yoonbin. 

Yoonbin se puso de pie mientras empujaba al hombre al suelo. Se limpió la ropa y le gruñó. 

— ¿Sabes qué? Mereces morir... Papá

Se dirigió hacia Yuri con esa mirada oscura en su rostro. Sus músculos se relajaron, sus nudillos se relajaron mientras sus ojos se suavizaban al ver a su hermana pequeña que estaba allí como una estatua.

Sentía emociones encontradas mientras la miraba a los ojos.  Se enojó porque no podía mantenerla a salvo de estos monstruos. Se sintió impotente porque sabía lo que vendría.  Pero se sintió feliz de que su hermana finalmente estuviera frente a él.

— Salgamos de aquí Yuri.

La agarró por la muñeca y la sacó de la habitación.

Solo para ser recibido por un grupo de hombres, sus armas apuntaban directamente hacia él y Yuri. 

— Dánosla, niño y serás libre de irte.

Eran sus hombres, ese monstruo, o peor aún, su padre tenía todo un ejército bajo su poder.  Pero a medida que pasan los días, el poder y el dinero no tienen nada. 

— Si no quieres ver el cadáver de tu esposa e hijos en la mesa del desayuno de mañana, piérdete — lo advirtió Yoonbin a lo que Yuri se estremeció cuando oyó eso ¿Era el su hermano?

¿Ese hermano que siempre se burlaba de ella llamándola chimpancé?  Ella se sorprendió por este lado de él, que nunca vio ... rápidamente se aferró a su brazo tratando de calmarlo. 

Yoonbin, por otro lado, miró a esos hombres.  Como si el hechizo funcionara, uno les abrió paso y se hizo a un lado. 

Su cuerpo tembló frente a su mirada.  Su fuerza se sentía pequeña frente a él.  Sonrió mientras caminaba fuera de la mansión y salió a la carretera.  Dejó escapar un profundo suspiro y observó a Yuri.

— Lo siento Yuri... No pude proteger-

— ¿Por qué no me dijiste que tenía ... un padre?  — Ella lo interrumpió.